El Parlamento de Israel ha dado luz verde a la formación del Gobierno de unidad pactado entre Netanyahu y Gantz, aprobando toda una serie de leyes para darle cobertura jurídica y regular su funcionamiento, después de que ayer el Tribunal Supremo autorizase al primero repetir como máxima autoridad política del Estado hebreo, pese a las imputaciones por corrupción que recaen sobre él.

Con el nuevo paquete de medidas aprobado por el órgano legislativo, Netanyahu iniciará el mandato como primer ministro, pero dentro de año y medio pasará el testigo al jefe de Azul y Blanco. Ambos líderes tendrán derecho a veto y se elimina el límite para el número de ministerios, mientras que parece que será el próximo miércoles cuando se celebre la toma de posesión.

Con ello, se acabaría provisionalmente con el periodo de incertidumbre política que ha sobrevolado sobre Israel a lo largo del último año, en el que se han celebrado nada menos que tres procesos electorales. Sin embargo, una de las dudas que planea en el aire es si Netanyahu sabrá ejercer como número dos a partir de octubre de 2021.