NAIZ

Los datos de Eurofound: la crisis sanitaria ahoga el empleo y la economía de los hogares europeos

Eurofound ha publicado un avance de la encuesta «Vivir, trabajar y COVID-19». Está abierta y todavía hasta julio se puede responder, pero el avance de las conclusiones es muy preocupante y denota los «niveles dramáticamente bajos de confianza» en la UE y en sus gobiernos.

Análisis de Covid-19 a trabajadores y trabajadoras. (Iñigo URIZ/FOKU)
Análisis de Covid-19 a trabajadores y trabajadoras. (Iñigo URIZ/FOKU)

La Fundación Europea para la Mejora de las Condiciones de Vida y de Trabajo (Eurofound) ha presentado los primeros resultados de una macroencuesta en línea, «Vivir, trabajar y COVID-19», que lanzó en abril dirigida a 85.000 personas y que ha contado, por el momento, con 62.755 respuestas.

Entre las conclusiones destacan que casi el 40% informa que su situación financiera es peor que antes de la pandemia o que «uno de cada cuatro encuestados también informaron haber perdido su trabajo temporal (23%) o permanente (5%)». Además tres cuartas partes de los desempleados dicen no poder sobrevivir durante más de tres meses.

(La tabla siguiente muestra el descenso de tiempo de trabajo durante la pandemia, por estados; en verde se refleja el descenso considerable y en azul el descenso menor)



Hasta julio estará abierto el plazo de respuesta. De las contestaciones, ya ha adelantado algunas inquietudes. Resalta el impacto de la pandemia de Covid-19 en la calidad de vida y el trabajo de las personas. Los resultados finales sobre el impacto de estos cambios a lo largo del tiempo se publicarán en setiembre, pero en este momento ya se conoce que «más  de la mitad de los encuestados» europeos están preocupados por su futuro y solo el 45% se siente optimista.

Confianza en los sistemas de salud

Los primeros resultados de la encuesta «Vivir, trabajar y Covid-19» de Eurofound muestran «una lucha» para responder a la crisis causada por la pandemia con muchos encuestados que informan de «niveles dramáticamente bajos de confianza» en la UE y en sus gobiernos, particularmente en varios Estados miembros tradicionalmente pro-UE, como el francés, el italiano y el español, donde el Covid-19 está causando más estragos a nivel social y económico».

Mientras, sí que muestran niveles de confianza más altos en los sistemas de salud para combatir el virus. Incluso los países más afectados por la pandemia, como Bélgica, Italia, Estado español y Estado francés concluyen que «confían» en los sistemas de salud por encima del promedio de la UE y muy por delante de sus gobiernos, los medios de comunicación y la UE.

La crisis causada por la pandemia ha tenido un fuerte efecto en el optimismo de las personas sobre su futuro, según explica Eurofound. Menos de la mitad (46%) de los encuestados de la UE eran optimistas sobre su propio futuro en comparación con casi dos tercios (64%) registrados en la Encuesta Europea de Calidad de Vida en 2016. Los encuestados de los países más afectados en la UE (Estado francés, Italia, Bélgica y Estado español) se encuentran entre los menos optimistas sobre su futuro y por debajo del promedio de la Unión Europea.

A nivel europeo, el bienestar mental también se ha visto afectado con las tasas más bajas entre quienes no pueden trabajar debido a una discapacidad o enfermedad (48%) y los desempleados (49%). Las personas de 50 años o más tenían un mayor bienestar mental (60%) que los menores de 35 años y los que estaban en el medio (con 56% y 57% respectivamente).

Soledad y teletrabajo

El 16% de los encuestados también dijo estar solo «todo o la mayor parte del tiempo» durante las dos semanas anteriores a elaboración de la encuesta, con el 20% de los encuestados jóvenes –menores de 35 años– sintiéndose de esta manera. En general, la soledad fue más común entre los encuestados en el Estado francés (22%) y menos común en Finlandia (9%). Esto es notablemente diferente de los hallazgos habituales en otras encuestas. En el 2016, la soledad solo fue tenida en cuenta por el 6%, disminuyendo a 4% en los menores de 35 años.
 
El teletrabajo ha despegado en todos los países de la UE, y más de un tercio de los que están trabajando comienzan a trabajar de forma remota como resultado de la pandemia. «El mayor número de personas que trabajan desde casa se informó en los países nórdicos y del Benelux (Bélgica, Países Bajos y Luxemburgo). En este caso también reportaron menos recortes en el tiempo de trabajo. «Casi una cuarta parte de todos los que trabajan remotamente tienen niños menores de 12 años», añade.

(En la siguiente tabla, la proporción de trabajadores y trabajadoras que han recurrido al teletrabajo en este periodo)



Jóvenes, los peor tratados
Sin embargo, mientras más personas están teletrabajando más que nunca, «uno de cada cuatro encuestados también informaron haber perdido su trabajo temporal (23%) o permanente (5%)». Son los hombres jóvenes los más afectados.

La mitad de los europeos ve como también se les está reduciendo sus horas de trabajo, especialmente en Rumania, Italia, Estado francés, Chipre, Grecia y Estado español por encima del 30% y el 35%. En cambio, los nórdicos han informado de una menor reducción en el tiempo de trabajo.

«Existe una creciente incertidumbre en torno a la pérdida de empleos adicionales, reducciones continuas en el tiempo de trabajo y licencias», como expresa Eurofound.

Así, los niveles más altos de inseguridad laboral se informan en los estados miembros del este y del sur, con un 20% en Bulgaria y un 15% en Grecia, afirmando que «sienten que es probable que pierdan su trabajo como resultado de la crisis».

Esta realidad que se está describiendo a través de las más de 62.000 encuestas recibidas muestra, por otro lado, que la cara más negativa de los europeos ante esta crisis sanitaria se sitúa en que «casi el 40% informa que su situación financiera es peor que antes de la pandemia».

La situación es aún más dramática para las tres cuartas partes de los desempleados que no pueden sobrevivir durante más de tres meses, «con el 82% que informa que su hogar tiene dificultades para llegar a fin de mes».  

Los temores de las personas sobre su futuro financiero varían mucho entre los Estados miembros, con los niveles más bajos de ansiedad reportados en Dinamarca (10%) y los más altos en Bulgaria (62%) especialmente entre los que tienen entre 35 y 49 años.