LAB ha recordado en un comunicado este viernes «los grandes beneficios obtenidos los últimos años, su política de expansión con la compra de empresas a nivel mundial, como la italiana Ilva y la india Essar Steel. Arcelor Mittal es la única empresa del Estado que lleva aplicando un ERTE durante once años consecutivos, gracias a una legislación actualmente derogada. Ha utilizado fraudulentamente el ERTE, destruyendo más de la mitad del empleo en Euskal Herria y 4.000 puestos de trabajo en el conjunto del Estado».
El sindicato abertzale añade que «la empresa ha reconocido públicamente la imposibilidad de aplicar el ERTE en algunos centros de trabajo de Euskal Herria por hallarse a pleno rendimiento, pese a que sigue incluyendo en el ERTE a todos los centros de trabajo y a todos sus trabajadores y trabajadoras».
LAB considera que «existen muchas razones para decir que no a este nuevo ERTE, que no lo olvidemos, traerá todavía peores condiciones para las y los trabajadores. Y a todas ellas hay que añadir una más, la mala fe negocial. Después de que la empresa diera por finalizada la negociación y anunciara la aplicación unilateral del ERTE, hemos conocido a través de medios de comunicación de Asturias una supuesta negociación del ERTE y contenidos concretos del mismo, al margen de su comisión negociadora».
El comunicado indica que «esta manera de actuar de la empresa no es nueva, pero no por ello es menos grave. La empresa utiliza el marco estatal para alterar la correlación de fuerzas y precarizar e imponer decisiones que acarrean mayor incertidumbre a las y los trabajadores vascos. Las plantas vascas son siempre moneda de cambio y las y los trabajadores vascos son las y los sacrificados. La empresa pretende dar un ‘barniz de legalidad’ a esa farsa llamando ahora a la mesa negociadora del ERTE, para recoger formalmente una decisión aparentemente ya negociada y adoptada en otros ámbitos».
LAB concluye que «no va a legitimar esta farsa que nos excluye y vulnera nuestros derechos. Necesitamos un marco propio para las plantas de Euskal Herria. Vamos a defender las y los derechos de las y los trabajadores vascos. Vamos a defender el futuro de nuestras plantas».