El lehendakari y candidato del PNV a la reelección, Iñigo Urkullu, ha señalado este domingo que es «inaceptable que en la Euskadi de 2020 haya quienes, ante unas vulneraciones de derechos humanos, pongan el grito en el cielo y, ante otras, miren para otro lado y las jaleen» y ha subrayado que el compromiso ético es para «siempre y en todo caso».

Urkullu ha ofrecido este domingo un mitin en el centro Tabakalera de Donostia en el que ha intervenido también el presidente del Euskadi Buru Batzar, Andoni Ortuzar, y la cabeza de lista por Gipuzkoa, Bakartxo Tejeria.

«Es inaceptable que haya dos varas de medir los derechos humanos», ha señalado Urkullu durante su intervención, en la que ha subrayado que su formación «seguirá impulsando una memoria crítica del terrorismo y la violencia».

Urkullu ha hecho un llamamiento «para construir el futuro de Euskadi asentado en valores de la cultura de la paz la convivencia y los derechos humanos sin olvidar el pasado».

Ha recordado el ‘Manifiesto de los 33’, firmado hace 40 años por Nestor Basterretxea y otras 32 personalidades de la cultura vasca «contra el terrorismo de ETA», una llamada «que sus destinatarios no atendieron» y causó a sus firmantes el rechazo de quienes, «siguen sin querer reconsiderar su actuación», ha señalado.

«Compromiso ético, constante»

En este sentido ha remarcado que el «compromiso ético» es una «constante» en el PNV y «va a dar continuidad en esa inversión social».

Urkullu ha reconocido el impacto que la pandemia ha tenido en la cultura, que es «innovación y futuro» además de «creatividad y empleo», ha dicho, por lo que «ahora hay que ayudar» a levantar a la cultura y su industria porque «es el momento de devolverle lo que ha dado».

Los tres primeros meses de pandemia, «que no ha concluido» ha puntualizado Urkullu, han mostrado a su juicio que hay «dos modelos confrontados», uno «el de la mayoría de los ciudadanos y las instituciones que han colaborado para buscar soluciones» y una «minoría ruidosa empeñada en poner palos en las ruedas quejarse y buscar culpables».

«Solo hay una manera de poner Euskadi en pie, trabajando en equipo y colaborando y ese es el modelo de gobierno que defiendo», ha concluido .

Ortuzar ha advertido de que «lo pasado y lo que está por venir» obliga a «afianzar un gobierno sólido con un lehendakari reforzado en las urnas que tenga capacidad para adoptar decisiones valientes, defender las políticas publicas más eficaces para salir adelante y que esquive los palos en las ruedas de la oposición».