Los líderes independentistas catalanes presos dormirán cuatro días a la semana en la cárcel y tres en su casa, a partir de mañana, según han acordado las juntas de tratamiento de los centros penitenciarios una vez la Generalitat les ha concedido la semilibertad.
Según ha informado la Secretaría de Medidas Penales de la Generalitat, las juntas de las cárceles de Lledoners, Wad Ras y Puig de les Basses han decidido aplicar a los nueve presos del procés la modalidad de régimen abierto habitual prevista en el artículo 83 del reglamento penitenciario, con lo que tendrán que pernoctar en prisión entre 8 y 11 horas, según lo que establezca cada programa, normalmente de lunes a jueves.
De esa forma, el tercer grado concedido a los políticos independentistas se hará efectivo a partir de este viernes. Se trata de una medida de ejecución inmediata y que solo puede ser suspendida o revocada por orden judicial.
El Supremo decidiría si hay recurso
La Fiscalía ha recurrido hasta ahora todos los permisos y medidas de flexibilización del régimen penitenciario de los presos independentistas, por lo que es previsible que también lo haga en el caso del tercer grado, en el que, a diferencia de las salidas laborales y de voluntariado del 100.2, será el Tribunal Supremo el que tenga la última palabra.
De acuerdo con la normativa sobre el régimen de semilibertad, el exvicepresidente de la Generalitat Oriol Junqueras, los exconsellers Joaquim Forn, Raül Romeva, Jordi Turull, Josep Rull y Dolors Bassa y la expresidenta del Parlament Carme Forcadell, así como Jordi Cuixart y Jordi Sànchez, podrán trabajar fuera de prisión y tener una «participación plena y responsable en la vida social y familiar».
Los centros penitenciarios donde están recluidos los presos del procés han establecido las medidas de control y seguimiento necesarias de cada uno de los reclusos, de acuerdo con sus respectivos programas de tratamiento.