Tres miembros de Mugitu! Mugimendua han subido sobre las 10.30 de la mañana de este lunes al balcón de la Delegación del Gobierno español y se han encadenado a los mástiles de la bandera española, europea y navarra. A continuación han colgado tres pancartas que rezaban «AHT stop».
Mientras, varios miembros de la plataforma han repartido panfletos y han coreado consignas como «Ama lurra defenda dezagun», «No al tren de alta velocidad» y el «Dinero del TAV para gasto social».
Diez minutos después han llegado tres furgones de la Policía española y han intentado en vano romper los candados de bici mediante una cizalla. Hasta las 11.45, los agentes no han podido soltar al primero de los encadenados, esta vez con una sierra radial.
Los tres opositores a esta infraestrucutura han sido detenidos y trasladados a la Comisaría de la Policía española, mientras que las personas que apoyaban la acción desde la calle han sido también identificadas.
Otro miembro de la plataforma ha explicado a los medios de comunicación que dos de los cuatro subtramos del corredor navarro del TAV que se encontraban en obras han sido paralizados: el Erriberri-Tafalla de 7,6 km y el Tafalla-Tafalla de siete km.
«Se han llevado a los trabajadores y a las maquinas sin dar ninguna explicación, ni el Gobierno central responsable del proyecto, ni el Gobierno foral facilitador y garante del mismo, ni las empresas a las que se adjudicaron los trabajos. Se han ido a la chita callando», ha remarcado.
Así, ha exigido «saber de verdad que ha pasado» y que el Gobierno español aclare si la paralización de los trabajos obedece a la actual situación económica o a las indicaciones de AIREF (Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal) que recomienda paralizar las obras del TAV pendientes de finalización, por su «nula o mínima» rentabilidad socio-económica.
«Queremos saber si la paralización ha sido coyuntural, indefinida o definitiva y qué va a pasar con los otros dos tramos que siguen en obras y con el proyecto del corredor navarro del TAV en su conjunto», ha añadido.
Por ello, ha señalado que con la acción de hoy «exigimos al gobierno central que paralice también los otros dos tramos: el Villafranca-Peralta y el Peralta-Olite y que den por clausuradas de forma definitiva las obras del proyecto del TAV, no sólo en Nafarroa sino en toda Euskal Herria, un proyecto que nunca debiera haber comenzado».
En virtud de ello, han reclamado que «restituyan todo el territorio destrozado para fortalecer la biodiversidad y la agroecología en un momento de crisis ecológica global y que destinen las ingentes cantidades económicas, todavía por dilapidar en el proyecto, a satisfacer las necesidades sociales de la población ante la mayor crisis económica de los últimos 100 años».
Asimismo, demandan que «devuelvan al pueblo todo el dinero robado gracias a las tramas corruptas del TAV formadas por empresas constructoras, clase política y banca –tanto OHL como AZVI adjudicatarias de los dos tramos todavía en marcha, saben mucho de ello–».
Además han exigido la puesta en marcha de un proceso participativo y que «se depuren responsabilidades de este desaguisado por malversación de fondos y destrucción del patrimonio».
«En definitiva, queremos que el proyecto más destructivo, despilfarrador, antisocial, corrupto y antidemocrático de la historia de Euskal Herria se quede en eso, en proyecto», han proclamado.