Convencidos de que la pelota a mano está inmersa en un momento histórico que podría no tener retorno, los miembros de Pilotabizi Pilotazale Elkartea solicitan a las administraciones y federaciones competentes que «reflexionen sobre el actual modelo de expresión máxima del deporte de la pelota como es la LEPM, así como sobre el modelo empresarial de explotación.
El objetivo de dicha reflexión debiera ser obtener como conclusión un modelo de competición y de explotación que garantice la supervivencia de la pelota a mano durante generaciones».
Asimismo, les insta a que «impulsen un plan estratégico junto con clubes y agentes, tanto físicos como jurídicos, relacionados con la pelota y otros ámbitos deportivos que consideren interesante su aportación».
Estas son las dos solicitudes más importantes de un escrito que en las próximas horas va a ser enviado a la Dirección de Deportes del Gobierno de Lakua, a la Consejería de Cultura y Deporte del Gobierno de Nafarroa y a las federaciones de Euskadi, Nafarroa, Rioja, Araba, Bizkaia y Gipuzkoa de pelota.
Esfuerzos infructuosos
En el documento, la entidad con sede en Amezketa asume que «sus esfuerzos mediadores han sido infructuosos» y manifiesta que las decisiones adoptadas por Baiko en las últimas semanas «son una huida hacia adelante que pone en entredicho tanto la labor fiscalizadora deportiva que deberían ejercer las autoridades competentes, administrativas y federativas, como también la labor formativa de innumerables personas y clubes, la dignidad de los pelotaris y el derecho de los pelotazales a disfrutar de los mejores frutos de nuestra ya exigua cantera».
Añaden, además, que «son de tal gravedad que consideramos traspasadas muchas lineas rojas que, aun sin saber si son irreversibles, sí se puede considerar que ponen en entredicho el desarrollo futuro normalizado de este deporte».
Asimismo, entienden que «pueden abrir heridas tan profundas que hagan difíciles, no solamente las relaciones de cordialidad necesarias en el ámbito deportivo sino las sinergias imprescindibles para aunar esfuerzos, elementos todos ellos de los que se ve necesitada la pelota a mano».
Por todo ello, vuelven a incidir en la validez del documento al que, desde la semana pasada ya se han adherido 61 entidades, el último el Club de Pelota San Cristóbal de Burgos.