«Vamos con ese punto de orgullo, de satisfacción y de confianza por saber que somos una buena Real», asegura Natalia Arroyo en vísperas de disputar el, posiblemente, partido más complicado de la temporada. No hace falta recordar a la técnica txuriurdin que el Barcelona es el vigente campeón y el único equipo que cuenta sus partidos por victorias sin haber encajado un solo gol –es tercero en la clasificación pero con tres partidos menos que los dos conjuntos que le preceden–. Lo sabe de sobra y es consciente de lo complicado que lo tendrá la Real para prolongar su buena racha pero cree que el «trayecto que llevamos a nuestra espalda» es un aval más que suficiente para no saltar al Johan Cruyff a ejercer exclusivamente de sparring.

En definitiva, es un partido de competición, que las donostiarras quieren ganar y preparan «con normalidad», sin olvidar que enfrente estará «el equipo más potente de la categoría y de los que más de Europa. Dentro de eso estamos trabajando en encontrar nuestros puntos fuertes para intentar llevarlos a cabo y detectar en qué situaciones pueden estar ellas más incomodas para intentar que también suceda. En este caso cuesta un poco más encontrar debilidades porque es un rival muy potente. Pero también es un rival que siempre arte de la comodidad y de la ventaja en el marcador, así que vamos a ver qué capacidad tenemos de ser cuantos más minutos mejor la Real que estamos siendo. El rival nos va a poner difícil que eso suceda pero vamos con la confianza de que nosotras también tenemos un gran equipo y vamos a intentar hacer muchas cosas bien».

En este sentido, y aunque el equipo aspira a celebrar su tercera victoria consecutiva por primera vez este curso, Arroyo hace hincapié en la forma en que sus jugadoras intentarán hacer esas muchas cosas bien. Que también es, precisamente, lo que destaca de la andadura de la Real en este primer tramo de la competición. «Lo importante son los resultados e ir sumando siempre desde las victorias pero nuestra mirada tiene que ir a las intenciones del partido, al jueego, y creo que ahí estamos siendo regulares –afirma–. El resultado ante Madrid y Granadilla nos rompe la dinámica de resultados pero muchas cosas no las rompe en cuanto a juego, sobre todo el partido ante el Granadilla. Así que vamos a intentar que la vuelta de Barcelona podamos decir que hemos hecho otro buen partido porque en eso sí estamos siendo un equipo regular. Vamos a ir con la sensación de que el trayecto a nuestra espalda nos lleva a enfrentarnos al Barcelona en una muy buena situación».

Arroyo, por otro lado, cree que hay que dar al 10-1 de la final de la Supercopa la trasendencia adecuada. Un resultado que «tuvo mucho de circunstancial. Se juntó el superacierto del Barcelona, con una Marta Torrejón en modo goleador, en una final… Hubo muchas cosas que no representan la distancia entre un equipo y otro. El equipo supo darle el valor que tenía en aquel momento. El Barcelona se lo curró y el equipo no supo estar lo suficientemente bien como para que no pasara lo que pasó. Pero también saben las jugadoras que estamos en otro contexto, que no es una final, es otra temporada, hay cosas nuevas, jugadoras nuevas, ideas nuevas… Y sobre todo es otro momento. El equipo lo tiene bien digerido», asegura. Y cree, además, que «ha servido para estar en un sitio mejor, para aprender, para ver que faltaban algunas cosas y había que mejorar otras, que el nivel de exigencia tenía que subir porque si queremos acercarnos a ellas hay que hacer algunas cosas más. Lo que hay que hacer es casi “agradecer” el marcador para darnos cuenta de que hay un camino por delante por recorrer, es la mejor manera de afrontarlo. No hay miedo ni sensación de revancha».

La técnica catalana, que tiene a toda la plantilla a su disposición, también se ha referido a la suplencia de Mariasun Quiñones en el último encuentro, en el que jugó Adriana Nanclares, a lo que se le ha unido su ausencia en la última convocatoria de Jorge Vilda, conocida este mismo mediodía. Explica, por un lado, que las porteras «son parte del equipo y todos estamos siendo sensibles a darle valor al nivel de las jugadoras, de los entrenamientos, y a partir de ahí a los momentos de confianza, a los partidos, a las características del rival y a tratar de elegir a las mejores en cada momento. Adri está entrenando bien, como Elene y como Sun, y dentro de esas variables, ante el Huelva tomamos esa decisión, entendiendo que mantenía ese equilibrio entre elegir un once, gestionar minutos y darle a todo el mundo que se está mereciendo. Lo difícil de entrenar es no poder premiar más a las que están entrenando muy bien», asegura y añade que «lo que sí sabemos es que las que no participan también contribuyen a que el nivel del equipo sea tan alto». En lo que respecta a la ausencia de Quiñones de la convocatoria de la selección española, cree que tiene que «vivirlo con naturalidad. Todo el mundo va a pasar por mejores y peores momentos. Tiene que entender que le avala una trayectoria y que tiene un nivel incuestionable, independientemente de que arranque con más o menos acierto en algunas acciones, lo que tiene que hacer es seguir peleando y trabajando y estoy segura de que lo va a hacer».

Nahikari vuelve a la lista de Jorge Vilda, en la que se estrena Maite Oroz

Hay dos grandes novedades en la lista que ha hecho pública Jorge Vilda de jugadoras convocadas para disputar con la selección española los próximos partidos clasificatorios para la Eurocopa de Inglaterra.

Nahikari García, ya totalmente recuperada, regresa a la convocatoria, en la que también están Irene Paredes, Ainhoa Vicente Moraza y Lucía García. Y además destaca la presencia de Maite Oroz, habitual en las categorías inferiores de la selección española, pero que debuta en categoría absoluta. Por el contrario, se caen de la citación Mariasun Quiñones, habitual en las listas de Jorge Vilda, hasta el punto de que ha participado en el Mundial de 2019 y la Eurocopa de 2017, Eunate Arraiza y Nerea Eizagirre.

La selección española se enfrentará a Moldavia (27/11) y Polonia (1/12) en busca del billete a la Eurocopa de 2022, que tiene prácticamente asegurado.

La presencia de jugadoras vascas es aún más numerosa en la convocatoria de la selección española sub20 para los entrenamientos que realizará en Marbella entre el 23 y el 26 de noviembre. Se trata de Adriana Nanclares, Oihane Hernández, Damaris Egurrola, Nerea Eizagirre Amaiur Sarriegi y Cecilia Marcos.