‘Collapsed in Sunbeams’ es el título que llevará el nuevo disco de la británica Arlo Parks, que se publicará el próximo 29 de enero. Hace unos meses lanzó su tema de adelanto ‘Green Eyes’, una canción que predispone a ayudar a las personas que están pasando por malos momentos. Habla sobre el autodescubrimiento, la autoaceptación y la adolescencia. Una canción que redondea el concepto del disco: una serie de viñetas y de retratos íntimos alrededor de su adolescencia y la gente que la conformó con sus raíces fijadas en la nostalgia y en el relato de la misma.

A nivel personal, Parks luchó con su identidad mientras crecía. Para cuando cumplió los 17 años, se afeitó la cabeza, se dio cuenta de su bisexualidad y compuso el material para armar un disco. Al crecer en el suroeste de Londres –mitad nigeriana, un cuarto chadiana y un cuarto francesa– aprendió a hablar francés antes que inglés. Era una niña tranquila que escribía cuentos y creaba mundos de fantasía. Llevaba su propio diario y le gustaba la poesía hablada. Comenzó a acercarse al universo de poetas estadounidenses como Allen Ginsberg y Jim Morrison y se aficionó a través de youtube al jazz y a Chet Baker.

En la actualidad sus referencias más cercanas las encontramos en la joven poeta de instagram Nayyirah Waheed y en el crítico y ensayista norteamericano Hanif Abdurraqib –su obra está sirviendo de inspiración para una generación de nuevos artistas de hip-hop–. Otra influencia cercana es el trabajo del escritor y blogger Iain S. Thomas. Sus escritos en el popular blog ‘I Wrote This For You’ han servido a Parks para explorar sentimientos en torno a la vida, la muerte, el amor, la pérdida, el arrepentimiento y la esperanza.

Las obras narrativas de todos ellos son tan influyentes en la composición de sus canciones como cualquier músico. Algo parecido le ocurre con libros como ‘The Bell Jar’ de Sylvia Plath y ‘Norwegian Wood’ de Haruki Murakami. «La forma en que Murakami escribe en ese libro es cómo aspiro a escribir mis canciones: de forma valiente, sensible y humana», reivindica Parks.

Canciones como ‘Water’ de Fela Kuti y ‘Sittin On The Dock Of The Bay’ de Otis Redding sonaban en la infancia de Arlo Parks, pero fue a los 13 años cuando descubrió a King Krule; un artista que influiría mucho en la música que escribe Arlo actualmente. También está presente la notable influencia del hip-hop –desde Kendrick Lamar, MF Doom y Earl Sweatshirt hasta los sonidos más confesionales de Loyle Carner–, el rock –Jimi Hendrix, Shilpa Ray y David Bowie–, así como los sonidos tenues y doloridos de Keaton Henson, Sufjan Stevens o Julien Baker. Existe una calidad visual, casi cinematográfica en su escritura, que nace de su amor por las películas de terror y el arte abstracto.

CD AIPAGARRIA

John Zorn

“The Turner Étude” • Tzadik, 2020 • Jazz

Nuevo trabajo del compositor estadounidense y totem del jazz más vanguardista. Se trata de un conjunto de piezas breves para piano inspiradas en las últimas acuarelas del pintor romántico inglés William Turner. Subtitulado como ‘Images and Impressions for Piano’, esta amplia suite abarca una variedad de estilos y formas que incluyen preludios, estudios de color, paisajes marinos, paisajes lunares y nocturnos. Se trata de una de las composiciones más largas de Zorn. Una obra rica en contrastes estilísticos que esta interpretada por el británico Stephen Gosling, integrante del proyecto Soupeso y cofundador del American Modern Ensemble y uno de los mejores pianistas de música avanzada en la actualidad.