Ahora que ha acabado con su mala racha en Ipurua, el Eibar se queda a cero fuera. Los azulgranas han caído ante el Levante, que ha remontado un gol adverso para superarles en la clasificación. Toda la vida que podía haberles dado enlazar dos victorias por primera vez esta temporada, se la ha quitado un tropiezo que vuelve a asomarles al abismo del descenso. Y eso en vísperas de recibir al líder de Primera, el Atlético de Madrid, para cerrar la primera vuelta.
Con un once en el que sólo ha repetido Arbilla respecto a la Copa –central en Las Rozas, lateral diestro hoy–, el equipo de José Luis Mendilibar no ha sufrido lo más mínimo, aunque tampoco ha inquietado a su rival, en un primer tiempo aburrido, que se acercaba más al encuentro de la temporada pasada en el mismo escenario, el primero entre estos dos rivales que se saldaba sin goles en Primera, que a cualquier otro de los que acostumbran a disputar entre Eibar y Levante.
La cosa ha cambiado por completo tras el descanso. El Eibar ha regresado mejor al césped y en seis minutos ha roto la igualada. La presión no ya en campo rival, sino directamente en el área, ha forzado los errores de Radoja y Aitor, permitiendo a Inui anotar su primer gol de la temporada, que ponía a su equipo por delante en el 51.
Se veía a los guipuzcoanos fuertes y convencidos y noqueado al Levante, más aún después de que, sólo cuatro minutos después, el colegiado anulara el gol de Radoja por fuera de juego. Han llegado los mejores minutos y las mejores ocasiones del Eibar –han probado Inui, Enrich y hasta Diop de volea– pero en diez minutos ha perdido la ventaja y el partido.
Paco López ha estado más fino con los cambios –difícil de entender la entrada de Recio en el 88 por parte eibarresa–. O quizá tiene un armario mejor equipado. Pero lo cierto es que ha acertado de pleno. Tres minutos después de entrar al campo, Melero llegaba al área para rematar una asistencia de Morales tras una rápida acción de los granotas. Y doce más tarde, con los armeros noqueados ahora, un contragolpe rapidísimo del equipo local ha permitido a Morales, especialista en golpear a su exequipo, establecer el definitivo 2-1.
Mendilibar: «Nuestro juego implica riesgos y los asumimos»
Más descontento que enfadado ha acabado José Luis Mendilibar, pese a que la remontada del Levante deja a su equipo nuevamente asomado al abismo y que llega sólo tres días después de que Las Rozas le levantara un 0-3 en menos de diez minutos. Pese a la coincidencia, el técnico cree que los dos partidos no son comparables y que lo sucedido en el Ciutat de Valencia tiene más que ver con la forma de jugar del Eibar que con los errores que se hayan podido cometer, por mucho que haya que afinar, algo que también ha asumido. «El jueves, con el 0-3, pudo ser un problema de desconexión. Pero con el 0-1 de hoy no es desconexión, es que asumimos riesgos. El Levante saca el balón jugado desde atrás y asume riesgos. Y en una de esas le hemos robado el balón y hemos marcado. Nosotros apretamos en campo contrario y asumimos riesgos. Y los dos goles nos han llegado así», ha declarado.
Reconoce Mendilibar, de todos modos, que «es raro que con 0-0 seamos capaces de gestionarlo y con el marcador a favor nos esté costando». «Son cuestiones que tenemos que analizar y mejorar porque con el empate a cero no hemos tenido tantos problemas», ha añadido el zaldibartarra, que también ha recordado que los dos centrales «son los que salen en la foto» de los goles pero la responsabilidad es compartida y que «llevamos seis años jugando así. No nos metemos atrás».