Los bares y restaurantes de la CAV han reabierto este miércoles sus puertas tras la decisión del Tribunal Superior de Justicia del País Vasco (TSJPV) de permitir la apertura de los establecimientos hosteleros que se encuentran en municipios con una incidencia acumulada en catorce días superior a los 500 casos por 100.000 habitantes.
«Hubo establecimientos que ayer abrieron, sobre todo aquellos que tienen una oferta menos estructurada. Es muy fácil abrir un bar de barrio con un par de tortillas y un cañero, otra cosa es abrir una sidrería o un restaurante de 200 plazas donde se necesita abrir maquinaria, llamar a 20 personas, y acopiar producto», ha explicado el secretario general de Hostelería Gipuzkoa, Kino Martínez.
En declaraciones a Europa Press, Martínez ha señalado bares y restaurantes van ir abriendo «con carácter general» hasta el viernes, aunque, según ha precisado, «hay gente de determinado tamaño que está esperando al discurrir del LABI».
Respecto a esa reunión, y acerca de la posibilidad de que el Gobierno autonómico decida aplicar medidas más duras para el sector, ha afirmado que no creen que «las decisiones del LABI vayan a moverse por sentimientos de revancha o de venganza por las decisiones del TSJPV en absoluto».
«Todos somos profesionales, se mira un bien común que es la salud de Euskadi, y la diferencia no está en los objetivos sino en las herramientas que se emplean», ha aseverado.
«Otras herramientas»
A su juicio, este auto «ha venido a demostrar que quizá es el momento de plantearse otras herramientas y no la sempiterna del cierre de la hostelería, que es lo que se ha empleado hasta ahora». Por ello, ha opinado que «quizá hay que buscar nuevas herramientas en los ámbitos sociales, en otros sectores, por ejemplo, el de transporte, el de las Fuerzas de Seguridad, que quizá deben aumentar sus plantillas para controlar mejor el comportamiento de la gente en ámbitos privados o sociales».
De este modo, ha insistido en que «hay otras muchas líneas de actuación» porque, tal y como ha criticado, «hasta ahora se ha recurrido a lo fácil, a lo que visiblemente puede tener más rédito político».
Martínez ha resaltado que «si la hostelería es tan vital para la propagación de la pandemia, no se justifica las trayectorias de la pandemia en Cantabria y en Euskadi sean simétricas cuando las actuaciones sobre el sector han tenido muchas diferencias a lo largo de los cuatro o cinco últimos meses».
«No se justifica que Madrid, que ha tenido una actitud para con la hostelería bastante más permisiva que otras comunidades autónomas de su entorno, tenga hoy unas tasas de contagio a inferiores a comunidades restrictivas con la hostelería como Murcia, Extremadura, Castilla-La Mancha o Castilla y León», ha insistido.
Y, tras destacar que «no hay datos epidemiológicos», el secretario general de Hostelería Gipuzkoa ha apuntado que, para defender su postura, Lakua «ha tenido que recurrir a un estudio de contagio hecho en EEUU por una universidad americana sobre la población americana, que no tiene nada que ver con nosotros ni en los sistemas que se han empleado para contener la pandemia ni en la hostelería».
«Los errores hasta ahora los ha pagado un sector, que es la hostelería», ha manifestado, y ha advertido de que desde las asociaciones de hosteleros han vuelto a comunicar a sus asociados la importancia de «mantener, cumplir y hacer respetar a los clientes» las restricciones vigentes en el sector para hacer frente al covid-19, y han incidido en que es «mas importante que nunca» porque, según ha dicho, «vamos a estar en el ojo del huracán».
«Volver a trabajar»
Por su parte, el gerente de la Asociación de Hostelería de Bizkaia, Héctor Sánchez, en declaraciones a Onda Vasca, recogidas por Europa Press, ha insistido en que «realmente la hostelería lo que quiere es volver a trabajar en una situación complicada, compleja, que supone un esfuerzo muy importante».
Sánchez ha insistido en que, tras las alegaciones presentadas tanto por los hosteleros como por el Ejecutivo de Urkullu, «en ningún momento se acredita que la hostelería es la culpable o que la apertura o el cierre de la misma tiene un efecto directo en la curva de contagios».
«No me corresponde a mí decir las medidas que se toman en Europa, lo que sí que digo es que las personas que toman esta decisión y que entienden que la hostelería tiene que estar cerrada son las mismas que hace no mucho nos decían que no había que llevar mascarilla por la calle y ahora hay que llevarlas, que había que tener dos metros de distancia y luego era metro y medio, que se podía fumar por la calle y ahora no se puede fumar porque el humo contagia», ha asegurado.
Asimismo, ha recordado que no se trata de una «una hostelería abierta libremente», algo que el sector no ha pedido. «Hemos pedido volver a una situación con unas limitaciones muy importantes y lo primero que hemos hecho, porque no somos unos inconscientes y sabemos cuál es la situación sanitaria y nos preocupa porque estamos hablando de vidas, es pedir responsabilidad a los hosteleros en esta reapertura, que las cosas se hagan bien, que se cumplan las medidas que están establecidas», ha remarcado.