Arnaitz Gorriti

Saski Baskonia decide cuándo romper el derbi de Miribilla (72-85)

La lesión de Jekiri ha sido el punto más negativo del claro triunfo gasteiztarra ante Bilbao Basket, que ve como único consuelo las derrotas de Gipuzkoa Basket y Betis a lo largo del domingo. Zoran Dragic ha aprovechado este derbi para irse hasta los 25 puntos.

La lesión de Jekiri en la rodilla ha sido la nota más negativa del derbi del Bilbao Arena. (Aritz LOIOLA / FOKU)
La lesión de Jekiri en la rodilla ha sido la nota más negativa del derbi del Bilbao Arena. (Aritz LOIOLA / FOKU)

RETABET BILBAO BASKET 72 - TD SYSTEMS BASKONIA 85

Después de que a lo largo de la jornada Acunsa Gipuzkoa Basket y Betis han salido derrotados en sus respectivos partidos –y la mala noticia de la victoria de Estudiantes–, los hombres de negro han saltado a su cancha a sabiendas de que la vida iba a seguir igual aun en caso de perder frente a Saski Baskonia, cosa lógica viendo el nivel de juego que el cuadro gasteiztarra está mostrando en los dos últimos meses.

Y esa inercia del gran nivel baskonista ha hecho doblar el partido a favor de los de Dusko Ivanovic, que se han permitido el lujo de tomarse un respiro después de romper el duelo en el parcial de 5-16 que ha ido del 52-58 al 57-83.

Lo peor del derbi ha sido la lesión de Jekiri, tocado de su rodilla derecha en el segundo cuarto y que no ha saltado a la cancha tras el descanso, al punto de tener la rodilla inmovilizada.

Tanteo hasta Dragic

El arranque no ha sido muy alentador que digamos. Jekiri y Serron han sido los únicos que han podido ver el aro medianamente abierto, porque el resto de sus compañeros, pese a encontrar opciones de tiro, en buena medida por la ventaja de tamaño por parte de Baskonia y cierta ventaja en la movilidad de sus escoltas en Bilbao Basket, no han dado una.

El empate a 9 de Miniotas ha provocado el primer tiempo muerto del duelo, tras el cual Saski Baskonia se ha ido con un parcial de 0-6, para que acto seguido, una discutible antideportiva de Pierria Henry haya sido aprovechada por los hombres de negro para replicar con un 8-0 a su favor, cerrando la racha dos triples de Rousselle, obligando a Ivanivic a volver a parar el partido con 17-15 para los bilbainos. De ahí a la recta final del cuarto, Jaylon Brown, efectivo desde la línea de tiros libres, ha aianzado la primera ventaja bilbaina, pero un parcial de 0-5 guiado por los revitalizantes Dragic e Ilimane Diop, salidos los dos del banquillo, ha dejado a los gasteiztarras por delante por un ajustado 19-20.

Sin duda, ha sido un cuarto de tanteo en el que cada cual ha buscado sus armas, sobre todo en el caso de los bilbainos, al tratar de revolver el río con presiones defensivas seguidos de zonas de ajustes. Pero este segundo cuarto ha sido el de los triples, de Zoran Dragic y de Jekiri.

Los triples han sido como una metáfora de tapa destapada, con los dos equipos acribillando a su rival desde la larga distancia, hasta que «Zoki» Dragic ha entrado en combustión, alcanzando los 21 puntos –ha acabado con 25; es decir, récord personal– antes del descanso y liderando la escapada del Baskonia que ha llegado a ir ganando por 29-38. Para alegría de los hombres de negro, la labor reboteadora de Balvin y los triples de sus compañeros han aguantado a los de Mumbrú vivos en el derbi.

Tantos triples se han jugado los de Mumbrú, que solo han anotado triples más un tiro libre de Balvin, errando todos sus tiros de dos puntos en el tramo final de la primera mitad, incapaz el cuadro bilbaino de seguir el ritmo de los gasteiztarras.

El duelo ha acabado con 35-45 para Saski Baskonia al final de la primera mitad, luego de un morrocotudo susto que ha dado Jekiri, al tener que retirarse dolorido de su rodilla derecha después de que Kulboka se le haya caído encima en la pelea por un rebote. El nigeriano ha permanecido junto a sus compañeros en todo momento, pero con la rodilla siempre inmovilizada.

Ola y contraola

Después de retornar de los vestuarios, un parcial de 2-5 con grandes canastas de Vildoza, ha parecido el momento de ruptura del derbi, pero Jonathan Rousselle se ha encargado de hacer reaccionar a Bilbao Basket, diversificando además la anotación en tiros de dos y de tres. Asimismo, la ausencia de Jekiri ha facilitado la entrada en juego de Balvin, que al fin ha podido empezar a anotar con fluidez, superando a Ilimane Diop y Fall por su combinación de corpulencia y experiencia.

No obstante, Saski Baskonia no ha permitido demasiadas alegrías a su rival, sobre todo a partir del tiempo muerto de Ivanovic con 52-58. La defensa gasteiztarra ha elevado sus prestaciones y solo ha permitido tres puntos en contra hasta el final del cuarto, todos ellos de Huskic, mientras que Giedraitis, Polonara y Pierria Henry han entrado en juego para llegar al cuarto final con 55-69 y el derbi, ahora sí, virtualmente roto.

Esa ruptura se ha consolidado ya con el arranque del período final, cuando un parcial de 2-8 ha dejado la diferencia en 20 puntos en favor de los gasteiztarras: 57-77. La defensa baskonista ha llegado a casi todos los desajustes, al punto de desesperar a los de Alex Mumbrú, mientras que sin hacer grandes alardes, los Polonara y Pierria Henry han seguido sumando hasta apuntillar a los hombres de negro, más allá de sus errores o desaciertos, ya que la diferencia en el ritmo y la actividad ha sido bien notable.

La renta máxima ha sido de 23 puntos, después de que un triple de Peters haya supuesto el 57-80. En adelante, el cuadro bilbaino ha reaccionado lo justo para maquillar el resultado, dando incluso minutos a Sedekerskis, Raieste y Kurucs, mientras que en el bando vizcaino varios jugadores como Jenkins o Kljajic hayan arreglado un poco sus números, para que la diferencia final no haya sido más escandalosa que el 72-85 final.