Prácticamente durante todo el encuentro el cuadro blanquiverde ha ido a remolque de un Granollers que, con esta victoria, se consolida en la cuarta plaza y se convierte en uno de los mejores locales de la categoría.

Los catalanes han sumado su cuarto triunfo consecutivo, merced a un gran ejercicio defensivo ante el que Helvetia se ha chocado en gran parte del envite, aunque nunca han permitido que las diferencias fueran muy grandes, lo que les ha permitido luchar por los puntos casi hasta el final.

El duelo ha comenzado con un ritmo lento y pesado, además de demasiados errores en el lanzamiento por parte de ambos equipos, lo que ha propiciado todo un recital de paradas de los porteros, que ha llevado a un exiguo 1-1 en los primeros cinco minutos.

Si primero ha sido Guàrdia quien se ha erigido como máximo protagonista, con cinco paradas, casi a renglón seguido le ha tomado el testigo Bols, con una actuación imponente al acreditar tres penaltis consecutivos parados.

Las intervenciones del guardameta danés no han podido impedir que el Granollers se marchase con una ventaja mínima a los diez minutos (3-2) y el partido ha ganado en ritmo e intensidad al haber múltiples transiciones por las intervenciones bajo palos.

Los vallesanos se han sentido cómodos en este contexto y han ampliado la ventaja a los tres goles (9-6) en el minuto 22, lo que ha obligado a Quique Domínguez a pedir su primer tiempo muerto. No ha habido reacción y Anaitasuna ha navegado a remolque de los anfitriones durante los minutos finales del primer tiempo, que ha concluido con 11-8.

Helvetia ha empezado con mucho mejor tono la segunda mitad, imponiendo un ritmo más elevado, pero esas mejores prestaciones han quedado diluidas por los goles de Márquez, que han propiciado un 13-11 en el electrónico, cumplido el minuto 34.

Del Arco, con pasado deportivo en el Granollers, se ha hecho en esa fase con el mando ofensivo y ha sido un auténtico quebradero de cabeza para la zaga vallesana que, pese a ello, ha mantenido la ventaja de dos tantos (17-15), gracias al acierto de sus extremos.

A partir de ahí, Anaitasuna ha bajado su rendimiento y ello lo han aprovechado los de Antonio Rama para abrir una brecha de cuatro goles. Un nuevo tiempo muerto navarro no ha conseguido frenar la dinámica negativa y las transiciones del Granollers han llevado el encuentro a un 25-20 a diez minutos para la conclusión.

Los visitantes han sido entonces castigados por múltiples exclusiones y sus ataques han sido contrarrestados con goles locales a portería vacía. El Granollers no ha bajado el listón físico y ha acabado imponiéndose por 30-24.

FICHA TÉCNICA:

30-Fraikin BM Granollers (11+19): Guàrdia, Marc García, Álex Márquez (1), Antonio García (6), Gassama (3), Rey y Adrià Martínez-siete inicial-; Sastre (1, ps), Gurri, Edgar (5), Lancina (3), Chema Márquez (3), Valera (1), Salinas (7) y Franco.

24-Helvetia Anaitasuna (8+16): Bols, Etxeberria (2), Bazán (2), Eduardo Fernández (2), Izquierdo (4), Del Arco (10), Chocarro (2)-siete inicial-; Cancio (ps) Gastón, Ganuza (1), Meoki, González, García (1), Fischer y Albizu.

Árbitros: Miguel Martín Soria y David Monjo. Exclusiones para Valera y Rey (2) por el Fraikin Granollers y González con tarjeta roja, Bazán (2), Chocarro y Fischer por el Helvetia Anaitasuna.

Parciales: 1-1, 3-2, 5-4, 8-6, 10-8, 11-8 (descanso); 14-11, 17-15, 21-19, 25-20, 27-23 y 30-24 (final).

Incidencias: Encuentro correspondiente a la 27ª jornada de la Liga Asobal en el Palau d’Esports de Granollers ante cerca de 750 espectadores.