Alex Txikon viajará ya este mismo viernes a Nepal para intentar alcanzar la cumbre del Everest, techo del mundo con 8.849 metros, y lo hará por la ruta clásica y sin oxígeno, en una expedición que en la que se plantea como objetivo «apoyar a un país que se ha volcado con los turistas y expedicionarios» y que se ha paralizado por la pandemia.
El montañero de Lemoa, que solo hace seis semanas que regresó del Himalaya tras intentar sin éxito la ascensión invernal al Manaslu, tratará de hollar la cumbre más alta del planeta en una expedición en la que únicamente estará acompañado por el periodista Iñaki Makazaga y el fotógrafo Sendoa Elejalde.
«Si bien es cierto que puede parecer un proyecto más modesto, para mí es una apuesta más personal y lo afronto con la ilusión y las ganas de siempre y con el convencimiento de tener que seguir manteniendo la cabeza fría llegado el momento», ha destacado Txikon antes de iniciar el viaje.
El alpinista vasco se ha fijado un plazo de tres semanas para lograr su objetivo. La expedición partirá este viernes del aeropuerto de Loiu y tiene previsto alcanzar el campo base (5.360 metros) el 2 de mayo, con la intención de subir a la cumbre por la vertiente nepalí.
La fecha de regreso de la expedición la tiene fijada para el 25 de mayo.
En cuanto al trasncurso de estas próximas semanas, Txikon ha puntualizado que «pese a estar en la situación de pandemia que estamos y que no habrá tanto tránsito de expediciones como en otros años, sabemos que coincidiremos con numerosos grupos y alpinistas allí, de modo que iremos valorando las condiciones día a día».