La Comisión Europea ha presentado este martes una propuesta para impulsar, con la ayuda de Frontex, los retornos voluntarios de los migrantes que no tienen derecho a pedir asilo en la Unión Europea, que suponen una de cada tres devoluciones.

Es la primera estrategia europea sobre «retorno voluntario y reintegración», y tiene por objetivo facilitar un marco legal y operativo para las devoluciones desde Europa y desde los países de tránsito, según han explicado en rueda de prensa la comisaria de Interior, Ylva Johansson, y el vicepresidente de la Comisión para la Promoción de nuestro Estilo de Vida Europeo, Margaritis Schinas.

Entre los motivos por los que Bruselas quiere impulsar este mecanismo está el coste económico: una devolución forzada asciende a 3.414 euros de media frente a los 560 euros de un «retorno voluntario», según datos del Servicio de Investigación del Parlamento Europeo.

El objetivo es aumentar el número de devoluciones

Según datos publicados por la Comisión el pasado mes de febrero, de las 491.195 personas de terceros países que se encontraban en la UE de forma irregular en 2019, los Estados miembros devolvieron a 142.320, es decir casi un 30%.

Johansson ha confirmado que solo un tercio de las personas que no tienen derecho a permanecer en la UE regresa a su país de origen y que, de las que vuelven, menos del 30% lo hace voluntariamente.

Esta cifra que las autoridades europeas consideran baja se debe, según el citado informe, a unos procedimientos fragmentados e ineficientes en la UE y a los bajos niveles de cooperación con países terceros en la identificación y readmisión.

En la actualidad, los Veintisiete tienen acuerdos de readmisión con 18 Estados, que incluyen a Turquía, Pakistán, Albania, Bosnia Herzegovina o Cabo Verde. Además, hay pactos no vinculantes con Afganistán, Guinea, Gambia, Etiopía, Costa de Marfil o Bangladesh.

Otro de los factores esgrimidos es que estos programas de retorno asistido no tienen suficientes recursos ni una capacidad administrativa que permita el seguimiento de las decisiones sobre devoluciones.

Mayor participación del Frontex

En cuanto al papel de la Agencia Europea de la Guardia de Fronteras y Costas, ésta ayuda ya a los Estados miembros en las devoluciones de los migrantes a sus países de origen, pero en 2020 solo un 18% de las operaciones en las que participó para esos retornos fueron voluntarias.

A través del mandato reforzado que va a tener esta agencia, Frontex podrá tomar parte en todas las etapas del proceso, incluido el asesoramiento previo, el apoyo una vez el migrante regresa y un seguimiento de la eficacia de la asistencia para su reintegración en el país de origen.