El Gobierno español ha aprobado este martes los indultos a los presos catalanes. El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha confirmado tras la reunión que el Consejo de Ministros ha aprobado el indulto parcial –los dirigentes continúan inhabilitados–, reversible y condicionado para los nueve de los condenados por el procés, una medida de gracia por «razones de utilidad pública». Tal y como se esperaba, el BOE ha publicado la concesión de los indultos en su edición de este miércoles.
En una declaración institucional en el Palacio de la Moncloa, que apenas ha durado cinco minutos, Sánchez ha avanzado que pretende «abrir una nueva etapa de diálogo» y «cerrar el enfrentamiento».
«Ahora es el momento de la política de pasar página y de volver a la vía que no se debió abandonar», ha reclamado el presidente español, tras dejar claro que estos indultos «no ponen en cuestión» la sentencia del Tribunal Supremo que condenó a los independentistas, y además están condicionados a que los beneficiados no vuelvan a quebrantar la ley.
La decisión se ha tomado en una reunión que ha durando más de cuatro horas, y en la que Sánchez ha vuelto a defender la necesidad de adoptar esta medida para afrontar el problema del conflicto catalán y «buscar la concordia, abriendo paso a la reconciliación y al reencuentro».
Periodo de seguridad de tres a seis años
En concreto, los expedientes de indulto que ha elaborado el Ministerio de Justicia contemplan la extinción de las penas de prisión que les resta por cumplir a los condenados, y fija un periodo de seguridad de entre tres y seis años que condiciona el perdón a que no vuelvan a reincidir en el delito.
El periodo más alto, de seis años, se impone al exvicepresident Oriol Junqueras, los exconsejeros Joaquim Forn, Josep Rull y Jordi Turull; seguidos de los líderes sociales Jordi Cuixart y Jordi Sánchez, quienes no podrán volver a reincidir en cinco años si no quieren ver invalidada su medida de gracia.
Tras estos periodos están los que se imponen al exconsejero Raül Romeva y la expresidenta del Parlament Carmen Forcadell, que se establece en cuatro años, mientras que en el caso de Dolors Bassa ese periodo se fija en tres años, el más bajo según han señalado fuentes del Ejecutivo.
Está previsto que salgan de la cárcel este miércoles
Los expedientes aprobados suponen la extinción total las penas de prisión que les resta por cumplir a los nueve condenados –se ha perdonado por años, no por delitos– por lo que la previsión del Gobierno español pasa por que su decisión pueda ser ya aplicada este mismo miércoles por el Tribunal Supremo, tras la publicación de los decretos de indulto en BOE en su edición de este mismo miércoles, como ya se ha producido.
Los partidos independentistas catalanes también prevén que los presos abandonen definitivamente la cárcel este miércoles y que, una vez en libertad, hagan declaraciones públicas.
En declaraciones a los periodistas a las puertas de la cárcel de Lledoners, el abogado Jordi Pina, que representa a Sànchez, Turull y Rull, ha asegurado que los presos saldrán «sí o sí» a las doce del mediodía del miércoles, ya que, en el caso de que el TS retrasara su orden de excarcelación tras el indulto, lo harían igualmente con un permiso penitenciario.
«Si se diese la circunstancia, que no quiero pensar, de que el Tribunal Supremo no fuese ágil a la hora de dar la orden de excarcelación de aquellos a los que el Gobierno ha indultado, obviamente saldrían mañana igualmente a las 12.00 horas tirando de los permisos que tienen, porque todos tienen días que les quedaban», ha aclarado Pina.
El Gobierno español ha estimado un total de nueve de las doce peticiones de indulto mientras que se han rechazado las de los tres condenados por desobediencia, Meritxell Borrás, Santi Vila y Carles Mundó, quienes ya pagaron las multas que se les impusieron y extinguieron su responsabilidad penal, al finalizar las penas de inhabilitación que les fueron impuestas.
Las inhabilitaciones de cargo público que se impusieron al resto de condenados, entre ellos el exvicepresident Oriol Junqueras, no se tocan en la medida de gracia aprobada por el Gobierno, por lo que los líderes perdonados no podrán optar a ocupar cargos públicos hasta la fecha en la que hubieran extinguido su condena de no haber sido indultados.
Aragonès: «Referéndum y fin de la represión»
El presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, ha afirmado este martes que los indultos ayudan a generar credibilidad al diálogo y la negociación con el Gobierno español, pero ha pedido la amnistía y pactar un referéndum de autodeterminación: «Es la hora de un referéndum acordado».
«Desde el Govern de la Generalitat destinaremos todos los esfuerzos a hacer posible esta nueva etapa donde la negociación y la política deben ser el espacio para resolver un conflicto que lleva demasiado tiempo enquistado», ha dicho en una declaración institucional que ha hecho en la Sala Gótica del Palau de la Generalitat acompañado de todo el Govern.
Aragonès ha defendido que los indultos no acaban con las causas judiciales que afectan a independentistas y que todavía están pendientes, por lo que ha reclamado la amnistía: «Exigimos al Estado a que cese toda la represión».