La Eurocopa más internacional llega a su fin con un duelo de renombre entre dos potencias futbolísticas como Italia e Inglaterra que buscarán su particular redención histórica en el torneo en un estadio mítico como el de Wembley en Londres.

Con unos 60.000 aficionados en las gradas apoyando al combinado local, Inglaterra se presenta como clara favorita. Juega en casa y cuenta con un auténtico equipazo. Un plantel con muchas estrellas con las que Gareth Southgate ha conseguido conformar un bloque sólido. Harry Kane y Sterling lideran el ataque de una selección construida a fuego lento y que ha demostrado que ha alcanzado el punto de maduración óptimo.

«Estamos en una final y estamos aquí para ganarla. Me alegro de cómo hemos representado a la gente y de legado que ha habido, pero ahora lo importante es traer el título a casa», manifestaba el seleccionador de los «pross» en la previa.

Harry Kane asumía que tendrá que lidiar con dos centrales correosos y experimentados como Chiellini y Bonucci, pero añadía que «esto no va solo sobre mí. El partido es Inglaterra contra Italia y creemos mucho en el equipo. Tenemos muchas fortalezas en el equipo y todo puede pasar en la final». Kane ha marcado 4 goles en lo que va de campeonato y está a un tanto de Cristiano Ronaldo y Schick, máximos anotadores hasta el momento.

Los ingleses alcanzaron las semifinales en el último Mundial, pero cayeron en otra fatídica tanda de penaltis. Llevan muchos años, desde 1966, acumulando decepciones. El propio Southgate protagonizó una de ellas al fallar la pena máxima en unas semifinales de una Eurocopa ante Alemania en 1996. Fue el campeonato en el que se popularizó el himno futbolero con el lema ‘Football’s coming home’.

«No escuché el 'It's Coming Home' durante quince años porque era muy doloroso para mí. Pero no creo que sea algo arrogante, la letra se ríe de nosotros mismos», aseguraba en la previa el seleccionador inglés.

En esta Eurocopa ya han superado algunos traumas como vencer a Alemania o sellar el pase a una final.

Inglaterra lleva tiempo diseñando una selección ganadora, implementando un metodo de trabajo para renovar el juego y los sistemas. La organización defensiva es su seña de identidad. Pickford tan solo ha encajado un gol en el torneo y fue en una falta en semifinales.

Asimismo,hace tiempo que dejaron de limitarse a practicar el juego directo. Siguen siendo dominadores de las acciones a balón parado, pero disponen de jugadores talentosos como Mount, Foden o Grealish y tampoco tienen verguenza en tirarse como lo hizo Sterling en el penalti señalado para ganar a Dinamarca en las semifinales.

La batalla en el centro del campo entre Rice y Phillips frente a Jorginho, Verratti y Barella determinará gran parte del desarrollo del partido. Inglaterra podría reforzar el medio campo para no partir en desventaja en esa zona. Los «pross» disponen de muchas variables en el banquillo y ese factor puede ser decisivo en el resultado final.

La Italia de Mancini también se ha amoldado a los nuevos tiempos, a pesar de que en las semifinales frente a España dejó en evidencia que sigue manteniendo la misma capacidad competitiva de siempre que personifican jugadores con carisma como Chiellini.

Con un estilo vistoso en el que predomina la velocidad en las combinaciones de ataque, la «azzurra» se ha ganado la admiración y el respeto. Pase lo que pase el proyecto sale fortalecido. Y es que después de quedar fuera de la última Copa del Mundo emprendieron una remodelación que puede alcanzar la gloria en Wembley.

Mancini admitía antes del partido que «es quizás uno de los momentos más importantes de mi carrera, porque tuve la posibilidad de jugar en una selección sub-21 y en una selección absoluta fantástica, pero no logramos ganar, pese a ser el mejor equipo en 1990».

Por su parte, Chiellini afirmaba que «es una suerte increíble poder jugar este partido, son partidos que podrían no volver a pasar en tu carrera. Pero hay que aliviar la tensión, sabemos que es importante, no es necesario enfatizarlo, sino mantener alta la concentración. Hay que disfrutar, con alegría, y jugar con despreocupación y un poco de locura».

La picardía de jugadores como el napolitano Insigne o las habilidades de delanteros como Chiesa pueden desequilibrar la balanza. Son muchos los ejemplos en los que el conjunto local se queda bloqueado por la presión ambiental y salta la sorpresa. Empezando por el famoso Maracanazo de Uruguay a la última final de la Eurocopa en París que acabó con victoria portuguesa ante Francia.

Ficha técnica

ITALIA. Once inicial: Donnaruma; Di Lorenzo, Bonucci, Chiellini, Emerson; Jorginho, Verratti, Barella; Chiesa, Insigne e Inmobile. Convocatoria: Roberto Mancini comunicará la convocatoria antes del partido. Bajas: Spinazzola (lesión).

INGLATERRA. Once inicial: Pickford; Walker, Stones, Maguire, Shaw; Rice, Phillips; Saka, Mount, Sterling; y Harry Kane. Convocatoria: Gareth Southgate facilitará la lista definitiva en las horas previas a la final. Foden es duda al no participar en el último entrenamiento por un golpe.

Campo: Wembley. Hora: 21.00 horas. Árbitro: Björn Kuipers (Países Bajos).