La Ertzaintza ha puesto a disposición judicial esta mañana a los tres adultos detenidos acusados de participar en la paliza sufrida por un joven de 23 años de Lemoa en Zornotza el pasado domingo. La víctima sigue ingresada y se mantiene «estable» dentro de la gravedad.
Los tres han comparecido ante el juzgado de Durango encargado del caso y dos de ellos, para los que el juez ha ordenado prisión provisional sin fianza, no han declarado, según ha señalado a los periodistas Juan Erostarbe, letrado de uno de los arrestados, a la salida de los juzgados.
El tercero, de 38 años de edad, sí lo ha hecho y «ha colaborado», según el abogado. Después ha quedado en libertad con la obligación de presentarse una vez al mes en el juzgado. Este hombre ha afirmado en su declaración que «no ha participado» en la agresión, según ha señalado otro de los abogados a los periodistas.
Alrededor de una veintena de jóvenes acorralaron y agredieron con palos y botellas el pasado domingo al chico de 23 años de Zornotza, que se encuentra ingresado en el hospital en estado muy grave.
La Ertzaintza ha detenido en total a ocho personas, de entre 15 y 38 años –hay cinco menores–, y las ha identificado como integrantes de «una banda juvenil violenta, autodemoninada Hermanos Koala, que esa misma noche participaron en otras agresiones y robos con violencia en la misma zona».
Tras propinarle una paliza, le robaron sus pertenencias y posteriormente difundieron imágenes de dicha acción delictiva en diferentes redes sociales, creando una «gran alarma social».
De las ocho personas incialmente arrestadas, cinco son menores, los cuales ya han sido presentados en la Fiscalía, mientras que los otros tres han sido puestos a disposición judicial esta mañana, una vez finalizadas las correspondientes diligencias policiales.
«Estable» dentro de la gravedad
Mientras, la víctima se mantiene «estable», aunque sigue muy grave, según han informado fuentes familiares. Los médicos confían en poder practicarle una resonancia magnética a lo largo del fin de semana para poder conocer la evolución del daño que padece.
Las mismas fuentes han detallado que no se ha producido «ningún cambio» en el estado del joven durante las últimas horas. La víctima, que ya ha sido intervenida quirúrgicamente en dos ocasiones, se mantiene «estable».
«De momento, ni a mejor ni a peor. Los médicos nos trasladan precaución. No ha empeorado y el lunes nos dirán más cosas», ha afirmado Alexandra Buric, en representación de la familia.
Según ha apuntado, el joven padece numerosos «coágulos de sangre en la cabeza», pero los médicos «confían en que pueda salir adelante, porque es un chico joven».
Respecto al estado del padre de la víctima, las mismas fuentes han reconocido que éste se encuentra «mal, no duerme, no come y no tiene ganas de nada». Además, ha señalado que le gustaría tener «privacidad».