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La subida de la electricidad dispara el IPC interanual por encima del 4% en setiembre

La continua subida del coste de la electricidad ha disparado la inflación interanual, que ha superado el 4% en Nafarroa, Araba y Gipuzkoa. La subida mensual del IPC se ha situado entre el 0,6% y el 1% en Hego Euskal Herria.

Una torre de alta tensión en Hernani. (Jon URBE/FOKU)
Una torre de alta tensión en Hernani. (Jon URBE/FOKU)

El Índice de Precios al Consumo (IPC) ha experimentado un crecimiento de entre el 0,6% y el 1% en setiembre con respecto a agosto, según los datos ofrecidos por el Instituto de Estadística estatal. La mayor subida se ha registrado en Gipuzkoa, con un aumento del 1%, seguida de Bizkaia, con un 0,8%, mientras que en Araba y Nafarroa los precios han subido un 0,6%.

En los ocho primeros meses del año, Nafarroa acumula una subida del IPC del 2,8%, Bizkaia del 2,9%, Araba del 3,2% y Gipuzkoa del 3,5%.

En cuanto a la evolución interanual, la inflación se ha disparado impulsada por el continuo aumento del precio de la electricidad y los carburantes. Solo Bizkaia se sitúa por debajo del 4%, con una inflación del 3,8%. En Araba, Gipuzkoa y Nafarroa, la tasa anual se eleva hasta el 4,1%. Se sitúan así en cifras de 2008, cuando la inflación también superó el 4%.

Según el INE, entre los factores que más han influido en este repunte figura el encarecimiento de la electricidad, que ha elevado los precios del grupo de vivienda en un 14,5% en comparación con setiembre de 2020, un avance al que también han contribuido las subidas del gasóleo para calefacción y el gas, que bajaron el año pasado.

El apartado de ocio y cultura se ha encarecido en setiembre un 0,9 %, un punto y medio más que en agosto, debido a que los paquetes turísticos han bajado menos este año que el pasado.

Junto a ello, también ha contribuido al alza el IPC la subida de los precios del transporte, derivada del encarecimiento de los carburantes y lubricantes, que el pasado año bajaron.

Por el contrario, los alimentos y bebidas no alcohólicas han subido sus precios un 1,8%, una décima menos, debido al abaratamiento de las frutas y del menor encarecimiento de las legumbres y hortalizas, lo que ha ayudado a contener la inflación.