Tercera derrota consecutiva de Bidaideak, esta vez ante el Mideba Extremadura, después de un paupérrimo inicio de partido y una posterior recuperación en el marcador, pero sin que la escuadra bilbaina haya acabado rematando la faena ante un rival muy sólido que, con su juego, ha presentado la candidatura a disputar los títulos.

Los de Adrián Yáñez han firmado su peor rendimiento en los diez primeros minutos desde que el equipo se refundó con su actual nombre hace ocho años. Durante ese tiempo ni siquiera han logrado llegar a las dos cifras, mientras que su contrincante ha logrado llegar al guarismo 25 en los primeros dos minutos del primer receso, con una ventaja de 16 puntos.

La falta de claridad de ideas en general, las imprecisiones en los lanzamientos, el atolondramiento en las llegadas a la pintura rival, una presión soft sobre las manos rivales y el nerviosismo propio que suele acompañar a la frustración, se han conjugado en la tormenta perfecta en la que se ha visto inmerso el cuadro vasco durante el primer parcial.

La entrada de Mariana Pérez y Txema Avendaño ha conseguido variar el desalentador panorama durante los siguientes diez minutos. Poco a poco, las diferencias se han ido reduciendo hasta llegar al descanso con un 26-34 bastante más alentador de cara a la segunda mitad.

Efectivamente, un triple de Asier García ha puesto de manifiesto que la tendencia estaba variando notablemente, siendo protagonista del tercer parcial la igualdad y emoción en el luminoso y ofreciendo Bidaideak sus mejores minutos, consiguiendo igualar a 43 el electrónico.

El conjunto bilbaino ha salido en plan vertiginoso para el último cuarto, lo que les ha llevado a capitanear el envite. Dos canastas seguidas de Luis Jasso han permitido que los anfitriones se colocasen con ventaja (55-54) por primera vez y la diferencia incluso se ha ido a un 61-56 a falta de ocho minutos y medio para la conclusión.

Sin embargo, el combustible de Bidaideak se ha agotado a partir de ese momento. El visitante Phill Pratt ha cogido la vara de mando de su equipo para voltear la situación (63-64), mientras la quinta de Mariana ha complicado la tarea para la escuadra vizcaina, que ha recurrido a lanzamientos precipitados ante la nueva desventaja.

Así, el 67-75 final ha expresado el transcurrir de la contienda, llevándose los puntos quien durante más fases ha dominado el marcador, dejando al equipo bilbaino ubicado en la séptima posición, después de enlazar también las dos anteriores derrotas ante Albacete y Gran Canaria.