El vicepresidente y portavoz del Ejecutivo de Nafarroa, Javier Remírez, ha comparecido este miércoles en su habitual rueda de prensa tras el Consejo de Gobierno. Tras repasar los acuerdos adoptados, en la posterior ronda de preguntas el tema estrella ha sido la posibilidad de adoptar medidas complementarias ante la evolución de la pandemia del covid-19.

Remírez ha destacado que los datos de esta semana presentan una estabilización respecto a los de la semana anterior, por lo que de momento se va a mantener la normativa tal y como está, aunque «se mantienen contactos con el sector hostelero y cultural para valorar las mejores medidas».

Entre las causas para la subida, ha destacado que la llegada del frío hace que la gente se reúna en espacios cerrados. Asimismo ha recordado que el número de casos aumenta en otros estados europeos y que Nafarroa no se puede aislar.

A diferencia de la CAV, donde se toma como referencia la tasa de incidencia, el portavoz foral ha explicado que a la hora de tomar decisiones «hay que tener más en cuenta las presiones asistenciales –hospitalizaciones– que los contagios. El riesgo de infección de una persona vacunada se reduce en un tercio, el riesgo de ingreso es cinco o seis veces mayor en personas no vacunadas». Según los datos de esta mañana, en las últimas 24 horas no se han registrado fallecimientos y se ha producido un nuevo ingresos hospitalario y un ingreso en la UCI. Permanecen ingresadas 39 personas, ocho de ellas en la UCI.

Por ello, ha continuado, las medidas que se estarían estudiando «no afectarían al conjunto de la población, sino que nos centraríamos en las de mayor riesgo de ser ingresadas, es decir, en la población que no está vacunada».

En ese ámbito, Remírez ha reconocido que «el pasaporte covid es una de las opciones que están sobre la mesa» para espacios cerrados, con menor ventilación y más dificultad de cumplir las medidas, como pueden ser los locales de restauración.  «Tenemos que hilar fino, por eso estamos conversando con diversos sectores», ha remarcado, recordando que sería necesario asimismo el visto bueno judicial.
 
Preguntado por la posibilidad de instaurar la vacunación obligatoria, ha apuntado que «es una cuestión que ha sido debatida en el ámbito jurídico y político. Tenemos que ser prudentes y garantistas, creemos que sería de difícil implantación, motivación y justificación».