Consolidar el segundo puesto liguero es el reto que se plantea Bidasoa Irun ante la visita del Bathco Torrelavega y, de paso, que una victoria contra los cántabros sirva de bálsamo después del varapalo sufrido entre semana al perder en Artaleku frente al Toulouse.

Los de Jacobo Cuétara, que tres días más tarde deben desplazarse a la cancha del Pfadi Winterthur suizo, no pueden fallar ante un peligroso rival que, pese a su condición de recién ascendido, está capacitado para dar un susto a cualquier equipo que no sea el Barcelona.

El técnico cuenta para el envite con toda su plantilla, lo que le puede permitir realizar cuantas rotaciones considere necesarias de cara a guardar oxígeno también para el encuentro continental. Bidasoa tiene tres puntos de ventaja sobre el Granollers, al que venció a domicilio en la última jornada de la competición doméstica.

Mantener el subcampeonato al final de temporada sería una magnífica noticia deportiva y económica para el club guipuzcoano, ya que ello permite disputar competición europea en fase de grupos, después de que la liga Asobal haya ascendido a segunda competición en la clasificación EHF.

«Jugamos en casa ante nuestra afición, esperamos el ánimo de los seguidores y compensarles por perder el otro día, para que siga todo el mundo muy ilusionado», ha especificado un Cuétara que ya ha dejado atrás el revés del martes frente al Toulouse.

La «activación» de los suyos será una de las condiciones necesarias para doblegar a un Torrelavega que «tiene buen equipo y, si no hacemos bien las cosas, nos van a dar problemas. Tenemos que jugar con mucha cautela y va a ser importante meternos rápido en el partido y poder dar nuestro nivel».

Un nuevo triunfo permitiría al Bidasoa seguir con ventaja en la lucha por el segundo puesto, si bien «todavía hay que seguir sumando en el último esprint de los partidos que quedan de la primera vuelta, el primero contra Torrelavega», ha insistido el técnico amarillo.

Por su parte, Helvetia Anaitasuna deberá guardar descanso forzado como consecuencia de los casos de coronavirus aparecidos en su plantilla tras aplazar el duelo que debía jugar este fin de semana con el Sinfín, además del de la pasada jornada ante el Antequera.