Cientos de personas se han concentrado este mediodía en Irun, frente al Ayuntamiento, para denunciar la muerte, ayer, de una persona migrante tratando de cruzar el Bidasoa. Es el tercer fallecido en seis meses en las mismas circustancias. «Ya anunciamos el 8 de noviembre que se estaban dando las condiciones para empujar a las personas migrantes a asumir riesgos innecesarios en su viaje migratorio hacia el norte de Europa», señala Irungo Harrera Sarea.
La red de acogida de personas migrantes o en tránsito remarca «el cierre de fronteras cada vez más riguroso», y «la insuficiente acogida hacia parte de las personas en tránsito» que llegan a Irun. «En esta última semana, a no menos de 10 personas se les ha denegado el acceso al dispositivo y han sido alojadas en casas particulares, quedando plazas libres en este centro del Ministerio del Interior que con dinero público gestiona Cruz Roja», señalaban ayer tras conocer el deceso.
En opinión de Harrera Irungo Sarea, a los migrantes que llegan a Irun «no se les da la acogida que se les tiene que dar» y es esta red de voluntarios «la que hace el trabajo que ellos deberían hacer».
Estas declaraciones las ha hecho a los medios de comunicación una portavoz de este colectivo, Josune Mendigutxia, quien ha participado en la concentración, en la que se han desplegados pancartas con lemas como «No a las políticas de muerte, no al racismo», «Libertad de circulación» y «No son muertes, son asesinatos».
«Nos duele en el alma, pero no nos ha sorprendido esta muerte porque sabíamos que esto iba a pasar y ya lo habíamos denunciado. Pedimos a las instituciones que la acogida que venden en la prensa la cumplan, porque una cosa es lo que venden y otra lo que realmente pasa, que no cumplen», ha destacado.
Mendigutxia ha remarcado que «el bloqueo que hay en las fronteras es brutal y empuja a los migrantes a las peores vías», a tratar de alcanzar su destino como lo intentó este sábado el migrante fallecido, un hombre de raza negra y origen africano, sobre cuya identidad y procedencia aún no ha informado el Departamento de Seguridad de Lakua, que está a la espera de corroborar los datos con los que cuenta hasta el momento.
Al director de Migración y Asilo del Gobierno Vasco, la portavoz de Harrera Irugo Sarea le ha reprochado que mantenga "el mismo discurso" que cuando murieron, también este año, dos jóvenes de 18 y 29 años al intentar cruzar el Bidasoa para eludir los controles policiales en la frontera.
«Dice que es una desgracia, culpa a Francia porque bloquea la muga y dice que hay que hacer una acogida más digna, pero siguen sin hacer nada en absoluto», ha manifestado la representante de la red, que desconoce la identidad del fallecido, aunque cree que Harrera Irungo Sarea sí ha podido atenderlo.
«Pero da igual si le conocemos o no. Es una víctima más de estas políticas migratorias de mierda. Parece mentira que después de haber cruzado el desierto y el Atlántico, se mueran en Irun. Es una verdadera barbaridad», ha enfatizado.
Además de la movilización de hoy, han llamado, junto a los colectivos de Ipar Euskal Herria, una cadena humana con velas para el lunes, 22 de noviembre, a las 19.00, que partiendo de las dos orillas del Bidasoa se unirá en el Puente de Santiago en memoria de las personas victimas de la frontera y para denunciarlas políticas migratorias europeas.