Tras reunirse telemáticamente esta mañana de jueves, los alcaldes de Donostia y Bilbo han acordado la suspensión de la celebración de Santo Tomás, que en ambas ciudades ya tenía los preparativos en marcha.

Con ello será la segunda edición consecutiva en que ambas ciudades se quedan sin una de las fiestas más populares y concurridas del año.

En una nota hecha pública, el Consistorio donostiarra señala que, «al igual que ha ocurrido ya con otras festividades del territorio histórico, el aumento de contagios en Donostia y en muchas localidades de Gipuzkoa, y la situación tensionada de los hospitales y demás servicios sanitarios, hacen incompatible la celebración de una festividad que atrae a la ciudad a miles de personas de todo el territorio».

Sobre la cuestión de la situación sanitaria, añade que la comisión técnica que asesora al LABI ha remitido una comunicación al Ayuntamiento en la que se recogen los datos epidemiológicos y las razones por las que «no se considera oportuno ni conveniente organizar la tradicional feria de invierno debido a la acumulación de personas en los diferentes recintos así como en los establecimientos de hostelería».

Por ello, y tras recabar la opinión de las autoridades sanitarias, el Ayuntamiento ha optado, «desde un criterio de prudencia», por no organizar la tradicional feria de Santo Tomás.

El alcalde, Eneko Goia, ha lamentado «de corazón» haber tenido que tomar esta decisión, «pero el sentido común y la prudencia aconsejan que pospongamos esta celebración tan querida por donostiarras y quienes nos visitan». «Santo Tomás es una fecha muy señalada en nuestro calendario vital, y tomar la decisión de suspender la fiesta se hace duro. Pero es necesario y pertinente hacerlo en esta situación», ha indicado.

El Ayuntamiento donostiarra finaliza señalando que la decisión de no organizar Santo Tomás «no condiciona las siguientes citas festivas señaladas en el calendario, que igualmente se irán decidiendo conforme avancen las fechas en función así mismo de la situación sanitaria y de las particularidades asociadas a cada evento festivo».

Con «gran pesar», pero «por responsabilidad»

En similares términos ha anunciado su decisión el Consistorio de Bilbo. A través también de un comunicado, ha señalado que «ha decidido no autorizar la feria de Santo Tomás este año, atendiendo a las recomendaciones recibidas en el día de hoy por parte del Departamento de Salud».

La medida se ha adoptado «tras analizar la situación epidemiológica actual, que desaconseja la celebración de eventos de estas características, por no poder garantizar que no se produzcan aglomeraciones en el espacio público».

El alcalde, Juan Mari Aburto, ha comunicado la decisión al presidente de la Fundación BBK, entidad organizadora del evento y junto a la que «se habían estudiado diferentes alternativas para la celebración de la feria, antes de hacerla pública».

«Con gran pesar –ha señalado Aburto–, nos vemos en la obligación, por responsabilidad y precaución, de no autorizar la realización de un evento tan tradicional como Santo Tomás, evento que confiamos pueda celebrarse el año que viene». Ha subrayado que es momento de «prudencia, responsabilidad y compromiso, tanto a nivel individual como colectivo».