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Xi Jinping advierte en Davos sobre una confrontación mundial

En un Foro de Davos virtual, el presidente chino, Xi Jinping, advirtió sobre las «consecuencias catastróficas» que puede tener el enfrentamiento global entre las grandes potencias y rechazó «la retórica que suscita el odio y los prejuicios».

El director ejecutivo del Foro Económico Mundial, Klaus Schwab, escucha la intervención de Xi Jinping por video conferencia.
El director ejecutivo del Foro Económico Mundial, Klaus Schwab, escucha la intervención de Xi Jinping por video conferencia. (Fabrice COFFRINI | AFP)

El presidente chino, Xi Jinping, advirtió ayer de que el enfrentamiento global entre las grandes potencias podría tener consecuencias catastróficas, en un discurso dirigido al Foro Económico Mundial en Davos (Suiza).

El Foro de Davos, considerado durante mucho tiempo el lugar de encuentro definitivo entre líderes empresariales y políticos y de la sociedad civil, se lleva a cabo por videoconferencia debido a la pandemia de covid-19.

El presidente chino ya se convirtió en este foro en 2017 en defensor del libre comercio y la globalización, tras la llegada al poder de Donald Trump en EEUU, que se volvía hacia las prácticas proteccionistas y empezaba a alejarse de los acuerdos internacionales. Xi volvió a presentarse ayer como el defensor del multilateralismo y advirtió contra las tensiones a nivel global, aunque no mencionó de forma explícita a la potencia rival estadounidense.

«La historia ha demostrado una y otra vez que la confrontación no resuelve los problemas, solo conduce a consecuencias catastróficas», señaló Xi.

«Nuestro mundo actual está lejos de ser pacífico. Abunda la retórica que suscita el odio y los prejuicios», añadió.

China, la principal potencia comercial del mundo, está promoviendo nuevos acuerdos regionales de libre comercio e iniciando nuevas «rutas de la seda» alrededor del continente euroasiático, pero también extiende sus lazos comerciales por África o Latinoamérica.

Con todo, la Unión Europea y Estados Unidos –sus dos principales socios comerciales– le siguen acusando de recurrir al dumping, medidas proteccionistas que penalizan los productos importados y restringen el acceso a empresas extranjeras. Xi mantuvo que «todo tipo de capital es bienvenido en China siempre que cumpla con las leyes» y que el país asiático continuará su proceso de «reforma y apertura».

El presidente chino recurrió a las metáforas para insistir en que la globalización no variará su curso: «Pese a que en un río existen contracorrientes, estas no pueden detenerlo en su avance hacia el mar». Por ello, exhortó a la comunidad internacional a que elimine barreras» en lugar de «construir muros y a que se oponga al proteccionismo.

Para Xi, aunque la economía mundial «está emergiendo de las profundidades», todavía existen riesgos» y entre ellos citó las disrupciones a las cadenas de suministro, el aumento de precio de las materias primas y lo ajustado del abastecimiento energético, además de la inflación. Sostuvo que la economía china «no debe crecer a costa del medio ambiente», pero defendió que «tampoco debe sacrificar su crecimiento para proteger el medio ambiente», y aprovechó para recordar el crecimiento del 8,1% en 2021.