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Los pobres están un 40% más expuestos a padecer las olas de calor

Un estudio ha revelado que las personas con rentas bajas tienen un 40% más de probabilidad de sufrir olas de calor por una combinación de ubicación y acceso a adaptaciones como el aire acondicionado.

Un niño se refresca, en plena ola de calor, en una fuente de Buenos Aires.
Un niño se refresca, en plena ola de calor, en una fuente de Buenos Aires. (Alejandro PAGNI | AFP)

Una investigación que ha revelado la revista científica ‘Earth´s future’ ha advertido de que «las poblaciones de bajos ingresos actualmente enfrentan una exposición 40% mayor a las olas de calor que las personas con mayores ingresos». Para fines de siglo, el estudio ha pronosticado que el 25% más pobre de la población mundial estará expuesto a olas de calor a «una tasa equivalente» al resto de la población combinada.

Así, el estudio ha destacado que el motivo de tal desigualdad reside en que las poblaciones más pobres habitan en peores ubicaciones y tienen una mayor incapacidad de mantenerse al día como resultado de la falta de adaptaciones al calor, como es el aire acondicionado.

Para realizar el estudio, analizaron datos históricos de ingresos, registros climáticos y adaptaciones al calor con el fin de cuantificar el nivel de exposición a olas de calor que enfrentan las personas con diferentes niveles de ingresos en todo el mundo. La exposición a las olas de calor se calculó multiplicando el número de personas expuestas a las olas de calor por el número de días de olas de calor. Los investigadores combinaron esas observaciones con modelos climáticos para predecir cómo cambiará la exposición en las próximas ocho décadas.

El estudio ha concluido que la cuarta parte de la población mundial con los ingresos más bajos enfrentará un aumento pronunciado en la exposición a las olas de calor para el año 2100, aun teniendo en cuenta el acceso al aire acondicionado, los refugios de aire fresco, las normas de seguridad para los trabajadores al aire libre y las campañas de concientización sobre la seguridad contra el calor. El trimestre de ingresos más altos, por su parte, experimentará pocos cambios en la exposición.

Las personas en el cuarto de población de ingresos más bajos enfrentarán 23 días más de olas de calor al año que las personas en los cuartos de ingresos más altos para el año 2100.

Los más contaminantes serán los menos afectados

El autor principal del estudio y climatólogo de la Universidad Estatal de Boise en Idaho, Mojtaba Sadegh, sostiene que «las poblaciones que han contribuido menos al cambio climático antropogénico a menudo son las más afectadas por los impactos del cambio climático». Históricamente, los países de mayores ingresos son los que han aportado la mayoría de los gases de efecto invernadero.

«Esperábamos ver una discrepancia, pero ver a una cuarta parte del mundo enfrentando tanta exposición como las otras tres cuartas partes combinadas… fue sorprendente», ha confesado Sadegh.

Por su parte, la profesora del Centro para la Salud y el Global Environment de la Universidad de Washington, Kristie Ebi, ha avisado de que emitir un pronóstico de ola de calor «no es suficiente» para garantizar que las personas «sepan qué medidas apropiadas deben tomar durante una ola de calor». Ebi ha señalado que es fundamental recopilar más datos sobre «la frecuencia de las olas de calor y las respuestas en los países de bajos ingresos».

Sadegh, por su parte, también ha propuesto medidas al respecto: «Necesitamos crear conciencia sobre los peligros y la seguridad térmica, y mejorar los sistemas de alerta temprana y el acceso a esos sistemas de alerta temprana».