A pesar de las derrotar por 94-93 ante el Maccabi y por 86-83 frente al Estrella Roja de Belgrado, Bitci Baskonia ha mostrado una notable mejoría a lo largo de esta semana. El obligado parón por la Copa, las «Ventanas FIBA» y la ofensiva rusa en Ucrania ha dado a Neven Spahija el tiempo que siempre ha solicitado para poder entrenar y perfeccionar un juego deshilachado durante demasiados partidos.

Pero esa mejoría no se ha plasmado en los resultados, en buena medida porque la segunda unidad del banquillo no ha rendido al mismo nivel que el quinteto titular que Baldwin, Marinkovic, Giedraitis, Fontecchio y Costello han consolidado. Además, con los cambios la defensa ha hecho aguas, en especial por parte de un Enoch al que le cuesta posicionarse correctamente en la cancha y, junto con alguna ayuda arbitral de más que han tenido los rivales de los gasteiztarras, el propio Saski Baskonia ha facilitado en demasiadas ocasiones segundos y hasta terceros esfuerzos a sus rivales por no conseguir cerrar bien el rebote defensivo.

Esta semana de tres partidos acabaría mucho mejor si los pupilos de Spahija plasmaran con un resultado positivo la mejoría que, por momentos, han experimentado. Pero para ello deberán ganar este domingo a las 18.30 a todo un Real Madrid, flamante subcampeón de la Copa, aunque en horas bajas.

En horas bajas porque entre lesiones y bajas formas, sus bases no carburan, hasta el punto que el haber podido descansar esta semana –los de Pablo Laso debían jugar contra el CSKA de Moscú, pero la exclusión de los equipos rusos de la Euroliga lo ha impedido–, detalle que hasta el propio entrenador gasteiztarra de los merengues ha agradecido porque su equipo ha utilizado ese tiempo extra en «recargar pilas y recuperar sensaciones», muy malas ellas tras caer por un estrepitoso 68-47 ante el Zalgiris Kaunas, farolillo rojo de la Euroliga, la semana pesada.

Hasta el momento, los resultados entre baskonistas y merengues a lo largo de la campaña están siendo horribles para los gasteiztarras, la verdad sea dicha. Se han enfrentado en tres ocasiones y los tres partidos se han saldado con victorias demasiado claras para el Real Madrid: 65-83 –todavía con Dusko Ivanovic en el banquillo gasteiztarra– en la Liga ACB, por 60-88 y 89-74 en la Euroliga, ambos duelos dirigidos por Neven Spahija en el banquillo baskonista. Cierto es que el Real Madrid está ahora peor que en las tres ocasiones anteriores –aunque en el único partido hasta la fecha del WIZink Center el cuadro merengue llegaba con un brote de covid-19–, y más la mejoría registrada en Saski Baskonia, tal vez haya opción para romper la tendencia.

«Berdintasuna, guztion ardura»

Por otro lado, Saski Baskonia ha anunciado mediante una nota que el Buesa Arena conmemorará el 8 de Marzo, Día Internacional de la Mujer Trabajadora, con diferentes acciones en la vuelta del baloncesto al pabellón azulgrana después de 24 días.

El 8M se conmemorará con diferentes acciones de visibilidad en el Buesa Arena coincidiendo con el partido de Euroliga que enfrentará a Bitci Baskonia y Anadolu Efes el martes a las 21.00.

Un Buesa Arena sin restricciones de aforo servirá un año más de altavoz para dar visibilidad al Día Internacional de la Mujer Trabajadora. El lema «Berdintasuna, guztion ardura» volverá a ser el paraguas de una serie de acciones que el Grupo Baskonia-Alavés ha querido envolver bajo otro lema propio como es «el 8M es más que un día», asumiendo la responsabilidad de que la conmemoración y las reivindicaciones del 8M deben perdurar más allá del propio 8 de marzo.

Se llevarán diferentes acciones en la previa y durante el encuentro para conmemorar esta efemérides. Como gesto de apoyo, los jugadores de Bitci Baskonia jugarán el partido con cordones de color morado en sus zapatillas de juego y realizarán un pasillo sobre la pista para presentar a todas las niñas y jóvenes que forman parte de la estructura de baloncesto femenino recién estrenada esta temporada. Las mismas que protagonizarán un partidillo durante el descanso del duelo europeo en el Buesa Arena que presenciarán en primera fila las jugadoras del primer equipo femenino del Deportivo Alavés, las Gloriosas, y que se iniciará con un balón que portará una pequeña jugadora del conjunto femenino azulgrana.

Bilbao Basket-Joventut

A las 17.00 del domingo Surne Bilbao Basket retorna al Bilbao Arena para vérselas con un Joventut de Badalona que cortó la noche del viernes una racha de tres derrotas al batir en la prórroga al Breogán de Lugo por 96-87.

Uno de los principales alicientes de este partido será ver la entrada de Miribilla, ya que el Bilbao Arena podrá, por primera vez en dos años, disfrutar de un aforo potencial de 10.014 espectadores; es decir, el 100% de su capacidad, sin restricción alguna.

En lo deportivo, los hombres de negro deberán valerse tras la marcha de Valentin Bigote a Le Havre y a los golpes y dudas de Ludde Hakanson y sobre todo Gytis Masiulis, a la espera de la confirmación de una PCR negativa para poder saltar a la cancha.

Los entrenados por Alex Mumbrú vieron el pasado 17 de febrero cortada una racha de siete victorias consecutivas, una racha que los ha puesto cerca de los puntos de play-offs de la Liga ACB, y a solo dos victorias de las 12 que normalmente se emplea como frontera para garantizar la salvación de la categoría.

Aunque todo apunta que las ambiciones bilbainas de estos días son mayores, cabe recordar que, por un lado, esta misma campaña los hombres de negro empezaron con un 0-5 y que, por el otro, fue precisamente un triunfo ante la Penya lo que sirvió a Alex Mumbrú y sus muchachos la pasada campaña el garantizar la permanencia por una campaña más en la Liga ACB.

Al cuadro bilbaino le restan 14 partidos, «un Tourmalet» en palabras del propio Alex Mumbrú, con intención de atemperar los ánimos de la afición bilbaina, que después de sufrir lo indecible la pasada campaña, en esta ha pasado del sufrimiento de los primeros partidos a la euforia de verse por primera vez en mucho tiempo codeándose con lo mejor de la Liga ACB.

Homenaje a Munduko Medikuak

Asimismo, el club bilbaino ha anunciado que quiere «destacar la labor de asociaciones, entidades, colectivos y personas que están prestando ayuda sobre el terreno en la guerra de Ucrania». Antes del comienzo del encuentro ante Club Joventut, el club realizará un reconocimiento a Munduko Medikuak (Médicos del Mundo), asociación que lleva siete años prestando asistencia en el Donbass, entre las provincias de Lugansk y Donetsk, donde «actualmente hay más de 90 personas en la zona y un equipo de refuerzo ha salido ya hacia Ucrania para responder a la emergencia y ayudar a las víctimas».

Por el mismo motivo, la entidad bilbaina quiere «mandar toda la fuerza del mundo a la población ucraniana en este momento dramático, sin olvidar que actualmente también hay población víctima de conflictos armados en lugares como Yemen, Palestina, Afganistán o Etiopía».