NAIZ

El CICR confirma el fracaso del segundo intento de evacuación de civiles en Mariupol

Tras el intento frustrado del sábado de evacuar a los civiles de Mariupol, el Ayuntamiento y las milicias de la república popular de Donetsk habían anunciado este domingo que iban a intentar llevar a cabo la evacuación. Sin embargo, el CICR ha confirmado que el segundo intento también ha fracasado.

Un coche circula por una solitaria carretera cercana a Mariupol.
Un coche circula por una solitaria carretera cercana a Mariupol. (Aleksey FILIPPOV | FRANCE PRESSE)

El Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) ha confirmado este domingo que el segundo intento de evacuar a los civiles de la asediada ciudad de Mariupol ha fracasado por la ausencia de un acuerdo «detallado y funcional» entre las partes del conflicto: las fuerzas ucranianas que defienden la ciudad y las milicias de la república de Donetsk.

A los dos bandos, el CICR les ha recordado que en modo alguno puede ser «garante de un alto el fuego entre las partes», que en las últimas horas se han responsabilizado mutuamente de su ruptura, y que la organización es «un intermediario humanitario neutral e imparcial».

El CICR ha recomendado a ambos bandos que fijen de una vez en común «una hora específica, los lugares de evacuación, las rutas de salida y otros detalles logísticos».

Asimismo, el CICR ha exigido «garantías satisfactorias» para desplegarse junto a la comitiva de evacuación con seguridad tras asegurar que sus equipos y estaban en la ruta designada de salida esperando a la gente antes de que se reanudaran las hostilidades.

«Nuestros equipos siguen en Mariupol y permanecen listos para facilitar los intentos de las partes para llegar a un acuerdo detallado», ha añadido la organización.

El Batallón Azov, un grupo paramilitar ucraniano de ultraderecha aliado del Ejército, y las milicias de Donetsk se han acusado mutuamente de incumplir su compromiso de alto el fuego y por ello las autoridades ucranianas –Ejército y Policía– han instado a la población civil a no abandonar los refugios.

El primer intento de evacuación de ambas ciudades tuvo lugar el sábado y acabó en absoluto fracaso después de que Rusia y Ucrania se acusaron mutuamente de incumplir el alto el fuego temporal en vigor en torno a estas dos localidades, donde viven aproximadamente unas 475.000 personas en condiciones deplorables, según las ONG.

Mariúpol es una ciudad portuaria de carácter estratégico, en la costa del mar de Azov, donde residen unas 450.000 personas. La captura de la localidad permitiría a Rusia conectar a sus fuerzas en el este del país con las destacadas en la península de Crimea.

Por su parte, Volnovaja está situada cerca de la antigua línea de frente de Ucrania con los separatistas respaldados por Rusia, la llamada línea de contacto, a unos 60 kilómetros de Donetsk. Allí viven unas 20.000 personas.

Acusaciones mutuas

El primer intento de evacuación de ambas ciudades tuvo lugar el sábado y acabó en absoluto fracaso después de que Rusia y Ucrania se acusaron mutuamente de incumplir el alto el fuego temporal en vigor en torno a estas dos localidades, donde viven aproximadamente unas 425.000 personas en condiciones deplorables, según las ONG.

El Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR), que tenía previsto desplegarse en las rutas de evacuación para garantizar la seguridad de los civiles, ha explicado durante las últimas horas en un comunicado que «sigue en contacto con las partes para facilitar las salidas en medio de una situación descorazonadora».

«Cualquier iniciativa que dé a los civiles un respiro de tanta violencia será bienvenida», ha declarado el CICR, quien ha pedido además que los corredores humanitarios destinados a trasladar a la población fuera de peligro estén bien planificados y de acuerdo con las partes en conflicto.

Ahora mismo, menos de un centenar de personas han podido abandonar Mariupol desde el inicio de las conversaciones de evacuación, según las estimaciones de las fuerzas de Donetsk, mucho menos que las decenas de miles de personas previstas para ayer, cuando iba a comenzar la evacuación.

El primer intento acabó fracasando entre acusaciones mutuas de incumplimiento de alto el fuego. El teniente de alcalde de la localidad, Sergei Orlov, aseguró que fuerzas rusas seguían bombardeando la ciudad y usando artillería. «Es una locura. No hay alto el fuego en Mariupol y no hay alto el fuego a lo largo de la ruta designada»”, ha hecho saber en declaraciones recogidas por BBC.

Por contra, las milicias de Donetsk responsabilizaron de estas nuevas hostilidades a grupos de extrema derecha ucranianos. «Los nacionalistas se han negado a proporcionar un corredor humanitario a los residentes de Mariupol, y además se han negado a marcharse a territorio seguro», lamentaron en un comunicado recogido por TASS.

Mariupol es una ciudad portuaria de carácter estratégico, en la costa del mar de Azov, donde residen unas 450.000 personas. La captura de la localidad permitiría a Rusia conectar a sus fuerzas en el este del país con las destacadas en la península de Crimea.

Siguen los combates en torno a Kiev

Por otra parte, las fuerzas rusas continuaban hoy sus ataques contra Irpin, Gostomel, y Makariv, en la región de Kiev, donde hay combates, siendo el punto más caliente en la autopista de Zhitomir, a 144 kilómetros al oeste de Kiev, ha informado el Servicio Estatal de Comunicaciones Especiales y Protección de la Información de Ucrania.

«Combates en Irpin, Gostomel, Makariv», ha señalado en su cuenta de Telegram. «El área de la autopista Zhitómir sigue siendo el punto más caliente», ha añadido.

En la región de Zhitomir hubo un ataque aéreo en Korosten que destruyó diez casas, mató a una persona e hirió a cinco.

Al norte de la región de Kiev, en Chernigov, hubo combates en las afueras, donde las tropas rusas intentan avanzar en la dirección de Kiev.

Niveles normales en Zaporozieh

Los sistemas de seguridad en la central nuclear ucraniana de Zaporozieh, la más grande de Europa, continúan sin registrar problemas y los niveles de radiación continúan dentro de la normalidad, dos días después de la toma de las instalaciones por parte de las fuerzas rusas, según ha informado este domingo el regulador nuclear de Ucrania.

La Inspección Nacional de Regulación Nuclear de Ucrania ha señalado en un comunicado publicado en su página web que dos de los seis reactores de la central están conectados a la red, mientras que una está apagada y las otras tres están en cierre. «El personal operativo de la central de Zaporozieh lleva a cabo la supervisión de los reactores y garantiza su operación segura, en línea con los requisitos de la documentación operativa», ha explicado.