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Adegi apunta que seis de cada diez empresas de Gipuzkoa sufren ya los efectos de la guerra

El 62,5% de las empresas guipuzcoanas ya sufre las consecuencias derivadas de la guerra en Ucrania debido al aumento de los costes de la energía, los suministros y las materias primas, según una encuesta de urgencia elaborada por la patronal Adegi.

Seis de cada diez empresas de Gipuzkoa sufren ya los efectos de la guerra, según una encuesta realizada por Adegi.
Seis de cada diez empresas de Gipuzkoa sufren ya los efectos de la guerra, según una encuesta realizada por Adegi. (Andoni CANELLADA/FOKU)

Una encuesta realizada por Adegi apunta que seis de cada diez empresas de Gipuzkoa ya sufren los efectos de la guerra de Ucrania. La asociación empresarial guipuzcoana ha destacado en un comunicado la necesidad de que el Gobierno adopte «rápidamente medidas de choque que contribuyan a paliar el aumento de costes de la energía», ya que, según advierte, de lo contrario habrá empresas que tendrán que «interrumpir su actividad».

Adegi ha indicado asimismo que, «a la mayor brevedad posible, se debería activar el mecanismo RED –medidas de reducción de jornada y suspensión temporal de contratos de trabajo– previsto en la legislación laboral para aquellas empresas que se encuentren en dificultades como consecuencia de la crisis de Ucrania».

Según el informe de la patronal, seis de cada diez compañías del territorio sufren ya los efectos derivados de la invasión de Ucrania por parte de Rusia debido al incremento del precio de la energía, los suministros y las materias primas, y advierten de que los problemas «se agravarán» hasta afectar a su facturación.

Del 15% de las empresas que tienen relaciones comerciales con Rusia-Ucrania, el 61,5% van a interrumpirlas por una decisión unilateral.

Entre los factores de mayor preocupación, figura el «rápido y desmesurado aumento de los precios de las materias primas y de la energía, que las empresas tienen problemas para trasladar a precios».

También se produce un «agravamiento de algunos de los cuellos de botella preexistentes» con dificultades añadidas en el ámbito de la logística.

Adegi constata también que el aumento de la incertidumbre afecta a la paralización de proyectos, inversiones, pedidos y reservas turísticas, al tiempo que se ralentiza el consumo.

Las sanciones económicas impuestas a Rusia ya están teniendo efecto directo sobre algunas empresas como, por ejemplo, las de maquinaria.

La patronal dice que hay «dificultades para recibir los cobros desde Rusia» y para el acceso al crédito, en especial al que tiene como destino la exportación.

Las empresas que todavía no están sufriendo los problemas prevén tenerlos en un tiempo, porque sus clientes o proveedores ya los están sufriendo, advierte la encuesta.

En cuanto al perfil de las empresas que han participado en el estudio de Adegi, el 66% son industriales –el 45% de la industria metálica y el 21% de la no metálica–, el 6% pertenecen a la construcción y el 28% al sector servicios, casi la mitad de estas últimas a los servicios empresariales.

Urkullu advierte de «consecuencias severas»

Sobre los efectos económicos de la invasión de Ucrania, el lehendakari de la CAV, Iñigo Urkullu, ha advertido de que está generando una situación de «economía de guerra» con unas «consecuencias severas», que lo van a seguir siendo.

El lehendakari ha reconocido que la guerra está provocando un incremento de los costes de producción por la subida de los precios de la energía y las materias primas, una situación que afecta especialmente a los sectores de la automoción, la fundición y lo relacionado al petróleo y al gas, aunque también a la logística, transporte y sector alimentario.

«Este es el momento de redoblar el esfuerzo en eficiencia energética, adoptar decisiones para flexibilizar la transición energética y acelerar la puesta en marcha de los proyectos de energía alternativa como los parques eólicos y el hidrógeno», ha insistido.

Ha añadido que a esta situación de emergencia energética se suma «la falta de acceso a materias primas básicas y necesarias, como el trigo o el cereal», lo que impactará en el sector primario y en la cadena de alimentación internacional y local.

Urkullu ha pronunciado estas palabras durante el acto de presentación de la nueva plataforma logística que la distribuidora Lidl ha promovido en la localidad alavesa de Nanclares Oka.