La baja de Jon Azkue y el estado físico de Rodrigo Salinas y Kauldi Odriozola mermará las posibilidades de Bidasoa Irun en la fase final copera, tal y como advertido su técnico Jacobo Cuétara, quien ha asegurado que su equipo llega «condicionado» por ambas circunstancias.
Así, ha recordado que Azkue se recupera de la fractura en el pulgar de su mano derecha, mientras que Salinas no ha podido jugar en esta segunda vuelta y llega sin apenas ritmo de competición. Además, ha desvelado que Odriozola «es seria duda para competir, ya que ha llegado lesionado de la selección».
El zumaiarra tiene una microrrotura en el cuádriceps y, aunque ha viajado con el equipo, lo más probable es que impere la precaución a la hora de utilizarlo, máxime teniendo en cuenta que el martes Bidasoa disputará la ida de los octavos de la Liga Europa contra el GOG danés.
El conjunto guipuzcoano, que ya está camino de Antequera, disputará en la ciudad malagueña la primera eliminatoria de cuartos de final del torneo del K.O. frente al Fraikin Granollers este próximo viernes a partir de las 12.30.
Pese a todos estos contratiempos, Cuétara ha asegurado que van «con la misma ilusión», porque en su «personalidad como grupo está el competir independientemente de quién esté en el campo». «Ya lo hemos demostrado y vamos a intentar demostrarlo de nuevo», ha añadido.
Como factor favorable está el hecho de que Bidasoa no se cruzaría con el máximo favorito, Barcelona, hasta una hipotética final, escalón al que habrá que llegar superando la reciente estadística del cuadro vasco en este torneo, con tempranas eliminaciones, lo que hace que la expedición amarilla viaje con cierta cautela.