«En la mañana del 26 de marzo, un buque civil comercial detectó en aguas del Bósforo un objeto similar a una mina y un equipo de submarinistas se ha trasladado de inmediato al lugar», ha informado en la red Twitter el Ministerio de Defensa turco.
«Dicho objeto similar a una mina fue recuperado por el equipo de submarinistas y se ha iniciado un procedimiento para neutralizarlo», concluye el comunicado, sin aclarar si realmente se trataba de un artefacto explosivo o no.
La cadena privada turca NTV aseguró poco después de que «según las primeras investigaciones se trata de una mina rusa de modelo antiguo», publicando imágenes de un objeto redondo flotante con protuberancias.
Durante la operación, las autoridades cerraron el tráfico de cargueros por el Bósforo en ambas direcciones, agrega la citada cadena, precisando que la supuesta mina se encontraba en el distrito de Sariyer, donde el Bósforo conecta con el Mar Negro.
El lunes pasado, las autoridades turcas alertaron sobre la posibilidad de que las corrientes marítimas lleven hasta las costas turcas algunas de las minas marinas que formaban parte de la defensa de la ciudad ucraniana de Odessa contra ataques rusos y que se cree fueron arrancadas de sus anclajes por una tormenta.
También Bulgaria emitió una advertencia similar, aunque expertos consultados por Efe indicaron que las minas podrían llegar hacia finales del mes.
Hace dos semanas ya se produjo un incidente en una zona ajena al campo de guerra al caer un dron militar de catorce metros sobre Zagreb (Croacia).