Iñaki  Iriondo
Cronista político

Refrendado el Pacto de Educación con espantada del PP+Cs y el único voto en contra de Vox

El consenso sobre el Pacto de Educación se ha concretado en una votación en la que PNV, EH Bildu, PSE y Elkarrekin Podemos-IU han dado su sí, aunque todos ellos ven también aspectos mejorables. El portavoz de PP+Cs se ha marchado en protesta por el trato recibido por su grupo y Vox se ha opuesto.

El representante de PP+Cs José Manuel Gil abandona la comisión criticando el mal trato recibido por su grupo.
El representante de PP+Cs José Manuel Gil abandona la comisión criticando el mal trato recibido por su grupo. (Raúl BOGAJO | FOKU)

La Comisión de Educación del Parlamento de Gasteiz ha aprobado este lunes por práctica unanimidad las bases del acuerdo sobre el futuro Sistema Educativo Vasco. Han sido con 13 votos a favor, de los grupos PNV, EH Bildu, PSE y Elkarrekin Podemos-IU. Tan solo la única representante de Vox ha votado en contra. Mientras que el portavoz de PP+Cs José Manuel Gil ha leído su discurso y se ha marchado en protesta por lo que considera el mal trato recibido por su grupo durante la negociación. A su salida ha dejado con la palabra en la boca al presidente de la comisión, Gorka Álvarez, que pretendía dar respuesta a algunas de sus quejas.

Los portavoces de los grupos que apoyan en acuerdo se han felicitado por el mismo, dejando claro que no es el que a cada uno de ellos les habría gustado si lo hubieran redactado solo por sí mismos, pero entendiendo que sirve de base suficiente para avanzar hacia una educación de calidad, con protagonismo de la escuela pública, fin de la concertación universal poniendo condiciones estrictas a los centros que no sean de titularidad pública, y para la búsqueda de una enseñanza plurilingüe que tenga el euskara como eje y que al final del ciclo obligatorio garantice que todo el alumnado tenga un nivel B2 en las dos lenguas cooficiales y de B1 en la lengua extranjera.

El parlamentario de Elkarrekin Podemos-IU, Iñigo Martínez Zatón, ha reiterado que el primer borrador que se presentó para las bases educativas no era del gusto de su grupo, pero que con el proceso de negociación y las mejoras que se han ido introduciendo se ha convertido en un documento que ahora hacen suyo y que puede servir de instrumento hacia el sistema que desean, 100% público, que supere la segregación, que mejore las condiciones de trabajo de la plantilla educativa, y que ofrezca una enseñanza de calidad, con el euskara como eje.

Iñigo Martínez ha dicho entender algunas de las críticas al acuerdo que se han planteado en la calle y ha anunciado que trabajarán para seguir buscando nuevas mejoras en temas que consideran pendientes. Ha afirmado que su grupo será ahora exigente en el cumplimiento de lo acordado y ha añadido que su voto a favor de estas bases no supone que vayan a apoyar el proyecto de ley al que dará lugar.

El portavoz del PSE en la comisión, José Antonio Pastor, ha destacado que los ejes introducidos por su grupo en el documento —apuesta por la escuela pública, refuerzo del trilingüismo y evaluación continua y externa del sistema— servirán para alcanzar el que debe de ser el objetivo último de la reforma, «propiciar el éxito escolar del alumnado, situando sus necesidades y su desarrollo integral en el centro del sistema para dotar a los estudiantes de las mejores herramientas posibles para desenvolverse en el mundo que les va a tocar vivir».

EH Bildu desmiente «bulos»

Ikotz Arrese, parlamentario de EH Bildu, ha comenzado su intervención recordando que se comprometieron a que si había un acuerdo sobre educación este sería sometido al criterio de sus bases y ha explicado que en la Asamblea Nacional celebrada el pasado sábado en Gateiz el 81% votó a favor del pacto. Cabe recordar que hubo un 8% en contra y un 11% de voto en blanco.

Después, Arrese ha señalado que con el acuerdo alcanzado se puede o no estar de acuerdo, pero ha denunciado a quienes en los últimos días se han dedicado a mentir sobre su contenido y difundir diversos «bulos». Ha detallado los puntos que demuestran que es falso que las medidas adoptadas contra la segregación «sean retrógradas», señalando que se recogen las iniciativas propuestas en su día por la Iniciativa Legislativa Popular Eskola Inklusiboa. Y ha agradecido a Save the Children la felicitación por el acuerdo en esta materia y el trabajo que realiza esta asociación.

EH Bildu también ha agradecido el apoyo de Kontseilua en las medidas referidas al euskara, negando que se hayan dado pasos atrás en esta cuestión, como se ha dicho. Ha asegurado que ninguna norma anterior detallaba tanto el nivel lingüísitico a alcanzar al final de la enseñanza obligatoria ni se ponían tantos medios para ello. También ha desmentido que el acuerdo vaya en perjuicio de la escuela pública, cuando se le da un protagonismo no recogido hasta la fecha y se ponen una condiciones desconocidas hasta ahora para acabar con la concertación universal.

La portavoz del PNV, Leixuri Arrizabalga, también se ha felicitado por la amplitud del acuerdo y ha agradecido a todos los grupos su compromiso y su «cintura en las negociaciones». Además, aunque el portavoz de PP+Cs ya se había marchado, ha asegurado que los retrasos que se dieron el viernes 18 de marzo en las reuniones de la ponencia se hicieron para la búsqueda de un acuerdo y, por tanto, con un objetivo «noble». Y ha criticado que algunos no quisieran estar en los acuerdo mirando a quién lo firmaba.

Espantada de PP+Cs

El portavoz del grupo PP+Cs, en este caso el único parlamentario de Ciudadanos, José Manuel Gil, ha criticado por un lado las formas en las que se llegó al acuerdo. Ha denunciado que se tardara una semana en hacerles llegar la traducción de las enmiendas presentadas por EH Bildu, lo que limitó su tiempo para trabajar. Y que después ni siquiera se les tuviera en consideración en las últimas negociaciones, ofreciéndoles el texto, lleno de anotaciones de colores, un minuto antes de la votación. Ha acusado a la portavoz del PNV, Leixuri Arrizabalaga, de haber asumido de facto la presidencia de las reuniones. Y ha anunciado que cuando terminara su intevención se iba a marchar de la comisión.

Además de las formas, se ha quejado también del contenido del acuerdo, que considera hecho a medida de la construcción nacional que propugna EH Bildu. «No es un informe basado en el consenso» ha dicho José Manuel Gil, porque «debería ser de todos», y solo es un pacto «entre partidos nacionalistas y pseudonacionalistas». Se ha quejado del protagonismo del euskara y de los límites a la libertad de las familias que se pretenden adoptar en contra de la enseñanza concertada.

Después de que el Tribunal Constitucional declarara el derecho de Vox a contar con el mismo tiempo de intervención que el resto de grupos, su única parlamentaria, Amaia Martínez, apenas ha utilizado 1 minuto y 18 segundos de los 10 minutos de los que disponía. Ha dicho que «estas bases no nos corresponden» porque son solo de los cuatro firmantes, y que está en contra del acuerdo porque pone como eje vertebrador al euskara cuando hay dos lenguas maternas, que no se han tenido en cuenta sus aportaciones y porque no se habla de alcanzar la excelencia, que tras cuarenta años no se está obteniendo.

Concentración en el exterior

Antes de que comenzara la reunión de la Comisión de Educación, en el exterior se han concentrado una treintena de personas convocadas por Euskal Eskola Publikoaz Harro Topagunea con la que querían señalar «que si bien se ha alcanzado un acuerdo educativo entre los partidos políticos, no se ha hecho un acuerdo social con los agentes educativos, especialmente con la comunidad de la escuela pública: sindicatos, familias, profesorado...»

A su entender, «este acuerdo no apuesta por la escuela pública, sino por la enseñanza concertada», puesto que asegura que «aumentará la financiación de la red privada» y añade que «las medidas que se anuncian contra la segregación no terminarán con ella». También critica que hay un «retroceso significativo» en el euskara.