El palacio Euskalduna de Bilbo acogerá el próximo 7 de abril una Asamblea Extraordinaria en la que se debatirá sobre la creación de una grada popular en San Mamés. Más de 2.400 firmas de socios dieron su respaldo a una iniciativa impulsada por la dinámica San Mamesen Orroa, compuesta por más de una veintena de grupos y peñas de la afición rojiblanca.
En el primer punto del orden del día los 1.200 compromisarios llamados a participar votarán a favor o en contra de crear una grada popular. En caso afirmativo, se elegirá entre las propuestas planteadas por la Junta que preside Aitor Elizegi y la de San Mamesen Orroa.
El proyecto de la directiva planteaba un fondo con unos 2.200 aficionados y fue rechazado en la Asamblea de diciembre de 2020 por apenas nueve votos en contra por lo que van a presentar una propuesta revisada.
La dinámica San Mamesen Orroa propone crear una grada popular con 4.184 localidades en la tribuna norte baja unificando las zonas de animación de los córners con los jóvenes abonados. Entienden que es una «necesidad estratégica» para el club y, por ello, creen que se deben de implicar todos los socios llevando a cabo un proceso de reubicación por orden de antigüedad. Se podrá hacer de manera individual o por grupos, haciendo una media.
Este planteamiento ha generado cierta controversia y puede ser un obstáculo para sacar la propuesta adelante. En el traslado al nuevo campo realizado hace menos de una década, el club también tuvo en cuenta el concepto de «equivalencia» en las localidades.
Según explican desde San Mamesen Orroa, en esta ocasión no lo han considerado ya que los socios que actualmente ocupan su sitio en la tribuna norte se quedarían con pocas posibilidades de trasladarse. Se calcula que son alrededor de un millar y es una de las quejas realizadas por parte de la plataforma de afectados que se han opuesto a moverse para facilitar la creación de la grada.
Aunque no tienen datos concretos, creen que las reubicaciones no afectarían a un 80% de los socios. El proceso se realizaría durante este verano y aprovechando el parón entre noviembre y diciembre por la disputa del Mundial de Qatar. Entraría en funcionamiento a partir de enero de 2023.
Jóvenes y cuotas
En la propuesta de San Mamesen Orroa también se hace referencia al reparto de localidades y cuotas a abonar. Reconocen que son precios orientativos y que la decisión final quedará siempre en manos de la directiva. 1.784 localidades serían para socios que pagarían unos 350 euros como ocurre ahora en las zonas de animación. 2.000 localidades se destinarían a los jóvenes abonados que se ubican en la tribuna sur alta y abonarían unos 300 euros. También se guardarían 250 entradas para venta a 25 euros y unas 150 localidades para abonados de más de 28 años. Esta figura desapareció antes del traslado al nuevo San Mamés por falta de localidades.
La idea es garantizar «el relevo generacional» en San Mamés y aglutinar en el fondo norte a todos los seguidores rojiblancos que quieran vivir el partido de pie impulsando el ambiente dentro del estadio.