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Bilbo

ELA exige el fin de la brecha salarial con una movilización itinerante en Bilbo

Decenas de trabajadoras y delegadas de ELA han exigido «acabar con la brecha salarial» ante las sedes de partidos políticos (PNV, EH Bildu y Podemos), Eudel y Confebask en Bilbo. Este sindicato no observa diferencias entre «los partidos de derecha y quienes se autodefinen de izquierda».

Una de las paradas reivindicativas que han realizado durante la movilización en Bilbo.
Una de las paradas reivindicativas que han realizado durante la movilización en Bilbo. (ELA Sindikatua)

Trabajadoras de la limpieza de interiores, de comercio, de telemarketing y de colectividades han tomado parte este miércoles en una movilización itinerante para «socializar la necesidad de acabar con la brecha salarial y defender los derechos laborales» en los sectores feminizados.

A lo largo de la mañana se ha realizado «un simulacro de carrera deportiva», que ha partido de la plaza Pío Baroja y ha tenido paradas en las sedes de partidos políticos como Podemos, EH Bildu y PNV, instituciones como Eudel y a la patronal Confebask, a los que se ha entregado sendas cartas.

«La razón de estas paradas es denunciar el doble lenguaje de una clase política que se declara feminista y se muestra contraria a la brecha entre hombres y mujeres hasta que le toca, directa e indirectamente; entonces se limitan a hacer declaraciones institucionales vacías de contenido», ha señalado este sindicato.

Ha añadido que, «cuando se alargan los conflictos en servicios que ellos consideran esenciales, imponen servicios mínimos cada vez más altos para impedir en la práctica el derecho de huelga e invisibilizar el conflicto».

«Diferentes siglas, mismas políticas»

La meta de esta carrera contra la brecha salarial estaba situada frente a la sede de Confebask. Allí, Mari Cruz Elkoro, secretaria general de ELA-Zerbitzuak, ha denunciado que «las mujeres que se organizan para acabar con la discriminación, con la precariedad, con la explotación, con los bajos salarios y con las jornadas parciales, son tratadas con una beligerancia extrema».

«Y para decirlo todo no vemos grandes diferencias entre los partidos de derecha y quienes se autodefinen de izquierda. No hay ninguna diferencia; si no, que se lo pregunten a las trabajadoras de Gorliz, Bermeo, Elorrio o Ermua: diferentes siglas gobernando, mismas políticas, misma beligerancia. Y esto, sobre todo, en los espacios de izquierda debería ser motivo de reflexión», ha indicado.

Por otro lado, como ejemplo de la profunda brecha salarial, ha comentado que en el sector de limpieza de interiores es del 45% respecto a los hombres que trabajan en la limpieza viaria. «Esta brecha salarial no solo se traduce en salarios, sino también en jornadas –ha puntualizado–, ya que los sectores masculinizados gozan en su mayoría de jornadas completas mientras en sectores feminizados lo que abundan son las jornadas parciales».