El francés Alexis Vuillermoz (TotalEnergies), un ciclista que lo ha pasado realmente mal tras dos aparatosas caídas que han frenado su progresión, ha obtenido un doble premio, victoria y liderato, en la segunda etapa de la Dauphiné, al imponerse en un reducido sprint a sus cuatro compañeros de escapada. Tras la victoria de Van Aert en la primera etapa, todo parecía dispuesto para que el flamenco repitiera, pero el Jumbo no ha acertado a cerrar la escapada del día y la aventura ha tenido un final feliz por solo cinco segundos, los suficientes para que el francés, que estuvo a punto de dejar el ciclismo el año pasado por una rotura de pelvis, pueda disfrutar, al menos un día, del amarillo.

La escapada del día se ha formado en los primeros kilómetros con seis corredores; Alexis Vuillermoz, Olivier Le Gac, Anders Skaarseth, Anthony Delaplace, Xandres Vervloesem y Kevin Vermaerke.

El pelotón parecía tener controlada la fuga en todo momento y, de hecho, el primero en caer ha sido el belga Vervloesem, que ha sido atrapado por el gran grupo ya a 60 kilómetros de meta.

Error de cálculo

En una jornada de continuo subre y baja, los otros cinco ciclistas fugados han seguido luchando por mantener viva la escapada, si bien sus opciones de llegar a meta parecían mínimas. Sin embargo, Jumbo Visma, que en la previa había mostrado su interés en mantener el liderato lo máximo posible, ha errado en sus cálculos, solo ha entrado a tirar cuando faltaban poco más de tres kilómetros y no les ha dado tiempo a cazar al grupeto, liderado por Vuillermoz.

Este martes la segunda etapa tendrá lugar entre Saint-Paulien y Chastreix-Sancy, con un recorrido de 169 km y final en un puerto de segunda, lo que hace complicado que el de TotalEnegies pueda mantener el liderato.