Idoia Eraso (Goñi, 2002) está muy satisfecha tras ser la mejor corredora de su categoría la semana pasada en los campeonatos de España de carretera de Mallorca: «Iba en busca de medallas y a hacer unos buenos campeonatos, pero no esperaba lograr los dos oros sub'23 y ni me lo creo».

Sus puestos en Mallorca, novena en la prueba en línea y undécima en la crono, han sido similares a los del año pasado, décima y novena, respectivamente, pero la del Laboral Kutxa ha dado un salto cualitativo al llegar el sábado con las corredoras que pelearon por la medalla de plata absoluta solo superadas por la balear Mavi García, que consiguió el doblete en la categoría absoluta con gran autoridad.

Idoia Eraso destaca que «el recorrido me favorecía más que el del año pasado, que salíamos y empezábamos a subir un puerto muy duro para escaladoras especialistas. Este año nos daba opciones a otro tipo de perfil de corredoras. No me veo mal subiendo, pero no lo hago como una Mavi García. Este año empezábamos con 90 kilómetros más llanos y el puerto era diferente, más propicio para mí».

Además en su objetivo de buscar las medallas le beneficiaba que «algunas corredoras que eran sub'23 el año pasado subían a élites y sabía que tenía más opciones de buscar el oro y lo conseguimos».

Tiempo para saborearlo

Pudo disfrutar del oro con mucho tiempo de antelación en la prueba en línea al ser la única corredora sub'23 que aguantó en el grupo perseguidor de Mavi García: «Una vez que llegué al sprint no busqué disputar un puesto mejor. Me hice los últimos kilómetros tirando porque Iurani podía aspirar al podio. Era otro objetivo lograr la medalla con ella y me conformaba con el oro sub'23».

Sus dos títulos y el bronce de Iurani Blanco recompensaron el trabajo del Laboral Kutxa: «Fue un día muy bueno para todas las corredoras del equipo. En el llano se notó que teníamos un gran bloque. Las compañeras pudieron cubrir todo para que Iurani y yo fuéramos más descansadas y nos salió muy bien lo que teníamos que hacer y se vio en el resultado».

Su gran rival en la lucha por el oro fue la guipuzcoana del Sopela Naia Amondarain, que logró la plata al acabar la carrera décima a 1:21 de la navarra. La campeona del año pasado, Inés Cantera, no estuvo en la disputa y abandonó. De su duelo con Amondarain, Eraso destaca que «se quedó en el último kilómetro de la subida. Yo no vi que cedía, pero me dijeron desde el coche que perdía unos metros y que tenía que aprovecharlo y tirar a tope. Una vez que me dijeron eso me tocó tirar hasta meta para abrir el hueco».

Buena contrarrelojista

La medalla de oro en la prueba en línea se sumó a la lograda el día anterior en la crono, en la que acabó a 2:28 de la ganadora Mavi García, y aventajó a sus rivales en la categoría sub'23 en 21 segundos a María Banlles y 29 a Mireia Trias.

La navarra da importancia a una especialidad en la que ya logró el oro en categoría junior en los campeonatos de España en 2020 y la plata en 2919: «Iba con el objetivo de hacer bien la crono, es una disciplina que me gusta y me motiva trabajarla porque para hacerla bien hay que practicarla. Tuve un buen día y salió bien el resultado».

Idoia Eraso es una corredora que en sus dos temporadas en el pelotón élite y sub'23 ha dado muestras de su regularidad al ganar la temporada pasada la Copa de España, competición en la que este año ha quedado empatada a puntos en el primer puesto con Susana Pérez en la categoría sub'23.

Sus resultados confirman la regularidad de una corredora que responde en todas las carreras en las que participa independientemente de los recorridos: «Tampoco puedo decir que soy escaladora, sprìnter o contrarrelojista, pero me puedo defender en todos los terrenos. Me considero bastante completa».

El objetivo para el futuro

Le falta ese punto para resistir a las mejores del World Tour y, de cara al futuro, señala que «de momento quiero ir paso a paso, pudiendo mejorar cada año corriendo más fuera para coger el ritmo y ver la evolución. Las mejores europeas están un escalón por encima y el objetivo es seguir acercándonos y ver hasta donde podemos llegar».

En este reto destaca la ayuda de la mejoría experimentada este año en el calendario estatal femenino con más pruebas UCI y del World Tour en las que ha podido correr con las mejores: «En mayo hicimos mucho calendario de gran nivel y eso nos da un plus para poder mejorar. Este año tenemos muy buen equipo además, nos llevamos muy bien, y eso ayuda para conseguir éxitos. Se ha visto en los campeonatos que podemos hacerlo bien».

Le queda la pena de no haber podido terminar la primera edición de la Itzulia en su estreno en el World Tour porque antepuso la salud: «Me puse enferma. Me dio pena abandonar, pero no se podía acabar así, no me vi en condiciones para seguir. Si aun con un nivel más fuerte ya es difícil, con mi cuerpo así, preferí no acabar».

Este año no participará en la Vuelta al no recibir el Laboral Kutxa la invitación e intentará confirmar su regularidad en pruebas del Euskaldun.