La Liga ha hecho público el límite salarial de los equipos de Segunda. El del Eibar es el tercero más alto de la categoría aunque se ha visto reducido en más de un 50% respecto a la temporada pasada. La caída en el del Alavés es muy superior tras su descenso aunque el club albiazul lo ha sobrepasado ampliamente acogiéndose a la normativa.
En el caso del Eibar, se sitúa concretamente en los 13’2 millones de euros, frente a los 30’15 de la temporada anterior, cuando contó con veinte millones de ayuda al descenso. Tal y como explicaba esta misma semana Jon Ander Ulazia, el club ha podido ampliar el inicialmente previsto al incluir entre los ingresos, en las proporciones permitidas, el dinero correspondiente a los fondos CVC que no tocó el curso pasado y parte del dinero ahorrado durante su estancia en Primera.
Sólo dos clubes tienen un límite salarial superior al azulgrana: e Granada, con 29’2 millones, y el Leganés, con 19’2.
El Alavés cae hasta la novena plaza en ese listado. La campaña pasada, en Primera, su límite salarial se situó en los 42’8 millones y ahora no pasa de los 9’8. Y eso que cuenta con la ayuda al descenso aunque, con el cambio de normativa, sólo puede incluir en sus ingresos un 60% de los aproximadamente 19 que le corresponden. Algo similar sucede con el Levante, que se queda en los 11’9. El Granada, por el contrario, cuadra mejor las cuentas y se sitúa en los 29’1, el más alto de Segunda.
El club albiazul, de todos modos, prácticamente duplica la cifra que le corresponde, acogiéndose a la farragosa normativa de la Liga, tal y como informó ayer.
En la cola de la categoría se sitúa el Lugo, con apenas 4’2 millones de euros de límite salarial. En lo que respecta a los recién ascendidos de 1ª RFEF, el Albacete alcanza los 5’7, el Andorra los 6’5 y el Racing se va hasta los 8’5, mientras los datos del Villarreal B se agregan a los de su primer equipo.
En el total de la categoría también se han reducido las cifras, pasando de los 244 millones de la temporada pasada a los 210’8 de la actual.