Lo ha dicho Emma Suárez, que encarna a la madre de David (Telmo Irureta), un joven con parálisis cerebral, en ‘La consagración de la primavera’: «No somos conscientes de las necesidades de las personas que conviven con nosotros en esta sociedad y aparecen en una silla de ruedas. Eso nos genera una cierta incomodidad y a veces nos escapamos. El trabajar en esta película ha sido un ejercicio de mirarlo de cara y descubrir y conocer esos terrenos. Y descubrir que la incapacidad está en nuestra mirada».

Fernando Franco presenta una propuesta sincera sobre la intimidad de las personas con diversidad funcional y se adentra en el terreno de la asistencia sexual. El camino lo transitan hasta entonces madre e hijo, hasta que en sus vidas aparece Laura (Valeria Sorolla). Franco habla sin tapujos pero desde la naturalidad, con sutileza pero sin renunciar a la sinceridad. «Siempre me han interesado los temas ‘subterráneos’ y en este caso hablar de la sexualidad de una persona que tiene parálisis cerebral pone a la gente en un terreno con muchos prejuicios. La normalización que se da en la película es justo por eso, para contrarrestar. Es una película que habla de la intimidad y justo se ha hecho así para contrarrestar esos a prioris, esos prejuicios».

Según la actriz Valeria Sorolla, «Laura descubre un mundo nuevo en torno a la sexualidad. La documentación que hice sobre el tema se centró en empezar a descubrir este mundo y qué es lo que despierta en ella en torno a la sexualidad. Ver el sexo desde otro punto de vista, desde los cuidados». 

En la búsqueda de esa naturalidad, según el director, fue clave el trabajo previo con los actores, que realizaron su trabajo partiendo de un guion abierto. «En la escritura del guion me preocupa mucho que los diálogos se vean reales, pero luego ensayamos bastante. En la fase de ensayos estamos con el guion por delante sabiendo que es un medio para llegar a un fin. Dejo encendido el detector de mentiras para ser consciente de si en algún momento no te crees algo. Cuando tienes buenos actores, si algo no funciona es porque seguramente esté mal escrito, por eso hay que dejar que ellos propongan e ir modificando sobre la marcha».

Otro de los protagonistas, el propio Telmo Irureta. Se ha mostrado radiante y feliz con el estreno de la cinta y ha asegurado que ha sido una gran experiencia en su recorrido. En ningún momento ha dejado de utilizar el humor en sus intervenciones, incluso ha hablado de sus planes de estudio. «Este mundillo de los actores es muy difícil. A veces tienes trabajo, pero no sabes si lo tendrás en un futuro. Por eso voy a empezar a estudiar psicología –también es licenciado en Magisterio y Pedagogía, según ha señalado su ‘madre’ Emma Suárez– e igual termino siendo psicólogo». 

En el mismo tono se ha referido a la temática que aborda la película y lo ha hecho desde una perspectiva personal. «Tenemos que educar y follar también. Si no, ¿qué es esto? Con la obra de teatro que estoy ahora también hablamos de discapacidad y sexualidad y la gente me dice que cómo me gusta. Pues claro, ¡y si hay que hablar se habla!». Que viva la primavera y su consagración.