NAIZ

Alegato antifascista de una superviviente de Auschwitz en el arranque del nuevo Senado italiano

Liliana Segre, superviviente de Auschwitz, ha recordado, en la apertura de la legislatura en el Senado italiano, que este mes se cumple el centenario de la marcha sobre Roma que supuso el comienzo del fascismo, un hecho cargado de «simbolismo» que le ha hecho sentir el «vértigo» de sus recuerdos.

El ultraderechista Matteo Salvini habla con Liliana Segre en la apertura del nuevo Senado italiano, acto en el que la superviviente de Auschwitz ha realizado un alegato antifascista.
El ultraderechista Matteo Salvini habla con Liliana Segre en la apertura del nuevo Senado italiano, acto en el que la superviviente de Auschwitz ha realizado un alegato antifascista. (Andreas SOLARO/AFP)

El arranque del nuevo Senado italiano, cuando se cumple el centenario de la marcha sobre Roma del comienzo del fascismo y con la ultraderechista Giorgia Meloni llegando al poder, ha sido escenario de un alegato antifascista por parte de una superviviente de Auschwitz.

«En este mes de octubre en el que se cumple el centenario de la Marcha sobre Roma, que dio origen a la dictadura fascista, corresponde a alguien como yo asumir temporalmente la presidencia de este templo de la democracia que es el Senado de la República», ha dicho la senadora vitalicia Liliana Segre, de 92 años.

«Y el valor simbólico de esta circunstancia azarosa se amplifica en mi mente porque, verán, en mi época, la escuela comenzaba en octubre. Y me es imposible no sentir una especie de vértigo al recordar que la misma niña que, un día como este de 1938, desconsolada y desconcertada, se vio obligada por las leyes racistas a dejar vacío su pupitre, hoy se encuentra por un extraño destino hasta en el pupitre más prestigioso del Senado», ha añadido.

Sus palabras han levantado a todo el Hemiciclo, que ha ovacionado largamente a Segre, activista y superviviente del Holocausto, en cuya infancia sufrió las represalias de las Leyes Raciales del régimen fascista por su origen hebreo y la deportación al campo de exterminio de Auschwitz-Birkenau.

Entre aplausos y con un discurso cargado de emoción, Segre ha sido la encargada de presidir el Senado al ser la parlamentaria de mayor edad entre los vicepresidentes de la legislatura anterior presentes en la Cámara Alta, un cargo que ha pasado a manos de Ignazio La Russa, hombre fuerte de los ultras Hermanos de Italia (FdI), la formación de la futura primera ministra, Giorgia Meloni. 

La senadora también se ha referido a la guerra de Ucrania. «Se cierne sobre todos nosotros la escalofriante atmósfera de la guerra que ha vuelto a Europa, cerca de nosotros, con toda su carga de muerte, destrucción, crueldad, terror», ha asegurado, antes de añadir: «Es una locura sin fin, la paz es urgente y necesaria».

Preservar las instituciones

Y ha subrayado que «la mayoría que salió de las urnas tiene el derecho y el deber de gobernar; las minorías tienen la tarea igualmente fundamental de hacer oposición. Común a todos debe ser el imperativo de preservar las instituciones de la República, que son de todos, que no son propiedad de nadie, que deben funcionar en interés del país, que deben garantizar a todas las partes».

Segre, nombrada senadora vitalicia por el presidente de la República, Sergio Mattarella, en 2018 «por haber ilustrado a la Patria con altos méritos en el ámbito social», desde 2021 es presidenta de la Comisión Extraordinaria de lucha contra los fenómenos de intolerancia, racismo, antisemitismo e incitación al odio y la violencia.

En su primera intervención en el Senado en 2018, también recordó las leyes raciales del régimen fascista y su memoria como deportada, levantando los aplausos de todos los presentes, como volvió a suceder en 2020, cuando intervino en el Parlamento Europeo, por invitación del entonces presidente, el fallecido David Sassoli.

Su ejemplo de supervivencia y sus esfuerzos en favor de la memoria le han granjeado insultos y ataques en los últimos tiempos, hasta el punto de que en 2019 las autoridades la protegieron con escoltas después de los mensajes de odio que recibía en las redes sociales.

La Russa, presidente

En la sesión de este jueves ha sido elegido presidente de la Cámara Alta italiana Ignazio La Russa, uno de los fundadores de Hermanos de Italia y que exhibió en una entrevista hace cuatro años una habitación en la que guardaba reliquias de la dictadura, incluida una figura de Benito Mussolini.

La Russa contado con 116 votos, en una primera victoria política para el partido de Giorgia Meloni que, sin embargo, se ha visto empañada por el desplante de Forza Italia, que ha mostrado simbólicamente su aparente malestar por la gestión de las negociaciones para repartir cargo.