La consejera de Salud, Santos Induráin, ha abogado este viernes por «hablar alto y claro» del suicidio, en un año en el que en Nafarroa se han registrado 58 casos, y ha puesto en valor que para un «abordaje integral» se trabaja en la implantación del «código suicidio» dentro de la historia clínica.

La consejera ha inaugurado esta tarde la jornada ‘Besarkada’ sobre los supervivientes al suicidio de un allegado, y en su intervención ha indicado que los 58 casos del pasado año en Nafarroa trascienden del frío número porque «un suicidio es un hecho terrible, un impacto de ondas concéntricas muy alargadas que alcanza a familiares, amigos y un amplio círculo social». Y ha sostenido que «es vital hablar alto y claro sobre él y romper el estigma y el tabú que lo rodea y que tan poco contribuye a su prevención. Al revés, va en su contra».

Ha puesto por ello en valor la labor de esta asociación en torno a la prevención y visibilización del suicidio, así como su trabajo vital como red de apoyo para todas las personas afectadas por la pérdida de un ser querido por todos los aspectos que rodean al suicidio o su intento.

Induráin ha afirmado que la salud mental es «uno de los grandes retos» y aún «más tras la pandemia», de la que aún se está calibrando la afectación y el impacto general, por lo que es importante hablar de ello, «normalizar la enfermedad y evitar el estigma» de algo que «nos puede pasar a todos».

Ha destacado además, que desde el sistema sanitario se trabaja por un «abordaje integral» del suicidio y con esta finalidad el Servicio Navarro de Salud, a través de la Red de Salud Mental, trabaja para poner en marcha el Código Suicidio, una herramienta integrada en historia clínica que facilite la identificación y seguimiento de personas en riesgo de suicidio así como la priorización en su atención.

«Bienestar emocional de la ciudadanía»
En cuanto a las necesidades de bienestar emocional y atención en salud mental de la población de Nafarroa, uno de los objetivos, ha indicado que se trabaja de forma coordinada con el Instituto de Salud Pública y Laboral de Navarra (ISPLN), la red de Atención Primaria y la Red de Salud Mental para avanzar en tres niveles de intervención. El primero es la promoción de la salud y la prevención; el segundo, la atención en los centros de salud de Atención Primaria a aquellas personas con problemas leves de salud mental; y el tercero, la atención especializada desde los centros de la red de Salud Mental.

Dentro de este abordaje, el departamento se ha puesto en marcha un nuevo programa de promoción del bienestar emocional en la ciudadanía que va a impulsar, a través de una línea de subvenciones, proyectos comunitarios en las entidades locales y sociales.

Induráin ha añadido que asimismo se sigue reforzando la incorporación de personal de Psicología en los centros de salud en un programa colaborativo entre Atención Primaria y la Red de Salud Mental que ya ha llegado a nueve zonas básicas de Iruñea y Tutera y en diciembre se implantará en otras tres zonas de Lizarra con el objetivo de extenderlo más adelante de forma gradual a toda Nafarroa.

«Enfrentar el problema y aportar herramientas en positivo de forma transversal es la única manera de encarar una problemática multifactorial, que nos afecta a todos y que plantea muchos retos como, por nombrar algunos, la soledad en nuestros mayores, la necesidad de potenciar la educación emocional, la empatía y el autoconocimiento o explotar el potencial de salud que poseen los círculos personales y laborales», ha indicado.