Iñaki Iriondo
GASTEIZ

La incineradora de Zubieta filtra tóxicos por problemas de estanqueidad

GuraSOS ha dado a conocer que en última asamblea de GHK el diputado José Ignacio Asensio advirtió de que la incineradora de Zubieta tiene un problema de estanqueidad que genera filtraciones y vertidos.

Imagen de los residuos almacenados en la incineradora de Zubieta
Imagen de los residuos almacenados en la incineradora de Zubieta (Gorka RUBIO | FOKU)

El diputado de Medio Ambiente de Gipuzkoa, José Ignacio Asensio, confesó en la última asamblea de GHK, celebrada el pasado día 3 de noviembre, que la incineradora de Zubieta tiene un problema de estanqueidad, como consecuencia del cual se generan filtraciones y vertidos, según ha comunicado la asociación GuraSOS, asegurando tener información de fuentes solventes.

La asociación añade que, en la mencionada asamblea, José Ignacio Asensio detalló que dicho problema de estanqueidad se produce en dos puntos del complejo. Uno de ellos sería el «extremo del foso previo al inicio de la incineración». El otro se hallaría en la «zona sur de la planta de biosecado».

Especifica que el diputado de Medio Ambiente, que hasta ahora ha afirmado desconocer el origen de las filtraciones tóxicas aparecidas en julio de este año en la regata Arkaitzerreka, sostiene que el problema de estanqueidad es puntual y accidental.

Sin embargo la presencia de dioxinas y metales pesados en tierras y aguas de la zona de la incineradora ya fueron detectadas en 2019, según documentación que obra en poder del Departamento de Medio Ambiente del Gobierno Vasco, lo que indicaría que el problema de estanqueidad es estructural y permanente desde el inicio del funcionamiento en pruebas de la incineradora.

GuraSOS mantiene que «la falta de estanqueidad en la instalación para contener los efluentes líquidos, que no deberían producirse, y los lixiviados se halla en el origen de las filtraciones y vertidos tóxicos que acaban en las aguas subterráneas y en Arkaitzerreka, y de ahí van al río Oria y a la zona de costa de la localidad de Orio». También está relacionado con «los planes de canalizar dichos efluentes a las aguas de Añarbe, para acabar en Donostia, en Monpás y la Zurriola».

Dioxinas en los huevos

Por otra parte, según una investigación realizada por la fundación holandesa Toxico Watch, entre 2019 y 2021 se ha cuadriplicado la cantidad de dioxina en los huevos de las gallinas de los alrededores de Zubieta.

La investigación, encargada por el Movimiento Contra la Incineración, de la que ayer dio cuenta “Berria”, recoge ese incremento de dioxinas en los huevos, en el musgo y hasta en las algas, donde el nivel se ha multiplicado por veinte desde la anterior medición.

Desde 2019 se han realizado tres análisis, a través de los cuales ha podido ver la evolución de las sustancias contaminantes que aparecían en esa zona tras la puesta en marcha de la incineradora. Y se ha comprobado que el incremento que se ha dado en dos años es muy preocupante si se compara con datos que ofrecen las inmediaciones de otras incineradoras que llevan hasta veinte años en funcionamiento. También es preocupante la contaminación que muestran las aguas de Arkaitzerreka.

Erraustegiak osagai toxikoak iragazten ditu

GuraSOS elkarteak aditzera eman duenez, Zubietako erraustegiak estankotasun arazoa duela aitortu zuen Jose Ignacio Asensio Gipuzkoako Ingurumen diputatuak hilaren 3an, GHKk burutu zuen asanbladan. Asensiok puntualtzat jotako arazo horrek filtrazioak eta isuriak eragiten ditu. Hala ere, dioxina eta metal astunen presentzia ez da berria erraustegiaren inguruko lurretan eta uretan. Lakuako Ingurumen Departamentuak daukan txosten batek 2019an detektatuak izan zirela jasotzen du. GuraSOSek manifestaziora deitu du biharko, Donostiako Kursaal aldean.