Bidasoa-Irun disputa este martes a las 20.45 el último partido de 2022 en Artaleku. El cuadro irundarra tiene además la posibilidad de dar un paso casi decisivo para su continuidad en la Liga Europea, un objetivo que precisa del triunfo ante un Eurofarm Pelister normacedonio con el que marcha empatado en la tercera plaza.

El equipo de la Bahía dekl Txingudi se ha hecho fuerte este año en su feuso donde solo ha perdido su partido de Asobal ante el Granollers y cuenta el resto de encuentros como local, también los europeos, por victorias.

Han sido triunfos continentales ante el Kolstad noruego en la ronda preliminar de esta competición, en la que ha sumado además dos victorias más contra el Aguas Santas Milaneza portugués y en su última comparecencia ante el HC Motor ucraniano.

Este determinante encuentro se presenta igualado por los números que uno y otro han mostrado en las cuatro jornadas ante los mismos rivales y se espera un gran ambiente en el pabellón Artaleku encargado de dar el plus que precisa el equipo de Jacobo Cuétara para hacerse con los dos puntos.

La mala racha liguera del equipo guipuzcoano se cortó además el pasado sábado con un triunfo trabajado pero convincente ante Bada Huesca.

«Después de victoria siempre se coge otro ánimo. Necesitábamos obtener victoria y buenas sensaciones, lo necesitaba el equipo y ha sido muy positivo», ha valorado el técnico bidasotarra, como uno de los aportes morales que recibirá su equipo ahora que llega el primero de los dos duelos consecutivos contra Eurofarm Peliser, dos jornadas que en el grupo D de la EHF European League servirán para «ver quiénes optan al primer puesto, al clasificarse… Todo eso se definirá en una semana», ha añadido a la web del propio club.

Recuperaciones

La recuperación en las últimas jornadas de Víctor Rodríguez, junto a la de los ausentes en el compromiso contra Skanderbor en Dinamarca, Jon Azkue e Iñaki Cavero, concede muchas opciones en ambas áreas a un Bidasoa con más problemas en el bloque de los zurdos.

La ausencia de media duración del internacional chileno Rodrigo Salinas, que se recupera de una operación de rodilla, se agrava con la duda del campeón europeo junior Julen Mujika, baja en los últimos encuentros, ademas de haber tenido problemas en las semanas previas los extremos Tao Gey, ahora recuperado, y un Iñaki Cavero que es pieza fundamental por ser además el encargado de los siete metros.

De cara al partido de Artaleku, la clave residirá en el juego propio más que en lo que pueda hacer el cuadro balcánico, según el técnico bidasotarra.

«Siempre hacemos el doble enfoque: preparamos los partidos al máximo, estudiamos al rival al máximo porque ayuda al rendimiento de nuestro equipo, aunque la clave siempre sea rendir nosotros. Evidentemente, si tienes mejor preparado al equipo contrario, te puede dar un extra. Nosotros no solemos cambiar cosas según el rival que tengamos delante. Nuestro trabajo es tenerlos bien estudiados y conocerlos bien, pero no cambiamos. Lo que hacemos es cuando los rivales nos plantean dificultades, vamos buscando soluciones en nuestra forma de jugar, porque así nos vamos haciendo más fuertes. Cuando otros rivales nos generen los mismos problemas, estaremos preparados».