A dos semanas de la gran manifestación del 7 de enero en Bilbo, las movilizaciones en favor de los derechos de los presos vascos se multiplican. Este viernes ha habido concentración de diversos sindicatos, con sus secretarios generales, junto a Sare en la capital vizcaina, manifestación de LAB en Iruñea y presentación de la marcha silenciosa que harán los municipios de Aiztondo el día 31. Este sábado, día de Nochebuena, hay convocatorias en Gasteiz y Lizarra, además de las habituales muestras de solidaridad en diversas kalejiras de Olentzero.

Una de las cuestiones que se reivindica en estas movilizaciones es que desaparezcan las trabas al recorrido legal de los presos y presas vascas. Y el tercer grado aparece en este momento como elemento principal de colisión, tras la devolución a prisión de varios prisioneros, forzada por los recursos de la Fiscalía.

Al respecto, la AVT ha anunciado este viernes una nueva vuelta de tuerca, derivada de una sentencia del Supremo. La mera presentación de recurso fiscal contra los terceros grados impediría en lo sucesivo que salgan en libertad, según ha confirmado posteriormente el Alto Tribunal español. El Supremo lo presenta como una «unificación de doctrina», hecha a partir de los casos de dos presos en Catalunya pero que parece tener como objetivo real de fondo a los vascos.

El Supremo establece que el recurso del fiscal a decisiones, ya sean judiciales o administrativas, que impliquen la excarcelación o semilibertad de presos condenados por delitos graves tendrá efectos suspensivos hasta la resolución definitiva por parte del tribunal al que le competa.

Considera la AVT que con ello se crea una jurisprudencia que afectará a los terceros grados que puedan concederse a presos vascos a partir de ahora.

Según datos recientes, ocho presos han sido obligados a reingresar en prisión tras habérseles revocado el tercer grado en la Audiencia Nacional, hay otros diez recursos pendientes de resolución y 28 casos de terceros grados que han sido confirmados, bien porque no fueron recurridos por la Fiscalía o porque los tribunales no aceptaron esta posición.

La norma habitual últimamente está siendo que la Fiscalía recurra una gran parte de los terceros grados concedidos ahora por el Gobierno de Lakua.

«Arma vengativa dirigida a los presos y presas vascas»

A juicio de Sare, la decisión del TS «consiste en continuar utilizando la justicia, como un arma vengativa, dirigida, especialmente, a los presos y presas vascas».

«Es consecuencia derivada de la ley 7/2003 que se aprobó para que los recursos del Fiscal, tuvieran efectos suspensivos inmediatos en la libertad de un preso o presa y de esta forma paralizar su puesta en libertad, sin valorar las razones por las que las juntas de tratamiento de las centros penitenciarios y en nuestro caso, la administración penitenciaria vasca, ha tomado la decisión de conceder la semilibertad o libertad condicional a estos presos, tras largos años de privaciones de libertad», ha manifestado en un escueto comunicado.

En la misma línea, Etxerat ha asegurado que supone una «vuelta más en el mantenimiento de la excepcionalidad». «Una nueva vuelta de tuerca por parte de la justicia española en el mantenimiento de la excepcionalidad penitenciaria, ha manifestado.

Desde LAB a UGT

En cuanto a las movilizaciones citadas de este viernes, en la de Bilbo los sindicatos ELA, LAB, UGT, ESK, Steilas, CGT/LKN, CNT, EHNE, Hiru y Etxalde, junto a la red ciudadana Sare, han impulsado la movilización ‘Etxera bidea gertu’ del 7 de enero.

Tras una pancarta con ese mismo lema, los secretarios generales de los sindicatos que conforman la mayoría sindical vasca se han concentrado en la plaza Moyua de Bilbo.

En declaraciones a los medios, el secretario general de ELA, Mitxel Lakuntza, ha señalado que la política penitenciaria «todavía sigue siendo una política de excepción». «No hay más que ver la actitud y los últimos precedentes que hay de Fiscalía de la Audiencia Nacional poniendo recursos a las progresiones de grado admitidas por las instituciones penitenciarias vascas», ha indicado.

En ese sentido, ha advertido de que la Audiencia Nacional «tiene que respetar la competencia de las instituciones vascas» con respecto a la política penitenciaria.

Por su parte, la coordinadora general del sindicato LAB, Garbiñe Aranburu, ha explicado que, una vez más, salen a la calle para «defender y reivindicar el derecho que tienen los presos a volver a sus casas».

Ha saludado que hoy la mayoría estén más cerca de sus casos, pero matizando que se sigue «alargando y entorpeciendo la vuelta a casa».

El secretario general de UGT-Euskadi, Raúl Arza, ha indicado que, con esta concentración, «un año más reivindicamos la necesidad de ir cerrando un conflicto que, por desgracia, duró muchos años».

Tras hacer una valoración «muy positiva» de este año porque «uno de nuestros objetivos era acercar a la mayoría de los presos a Euskadi y es un número muy reducido de presos los que quedan ya por llegar a Euskadi», ha precisado que están «reivindicando la necesidad de abrir una fase en la que el tratamiento a los presos no tenga que ver con políticas de excepción que se hicieron en su momento».

En Iruñea, mientras, miembros del sindicato LAB se han manifestado por las calles de Alde Zaharra en favor también del retorno a casa. Joseba Pagola ha resumido a Efe que «es necesario que desaparezcan las medidas de excepcionalidad que se aplican a los presos vascos» y ha invitado además al Gobierno navarro a solicitar la competencia en materia carcelaria.

Y este viernes se ha presentado también una marcha silenciosa promovida para la tarde del día 31, sábado, por los ayuntamientos de Aiztondo (Amasa-Villabona, Zizurkil, Asteasu, Aduna y Alkiza). En la comparecencia han estado sus alcaldes y alcaldesas. Han matizado que tanto a PNV como a PSOE y al Gobierno municipal de Larraul se les ha invitado a sumarse a la manifestación y el manifiesto, pero no lo han hecho.

El manifiesto expone que «hoy es el día en que todos los presos de Aiztondo se encuentran en cárceles de Euskal Herria. Algo hemos avanzado». Pero acto seguido quiere recordar que han sido décadas de «políticas inhumanas con el objetivo de castigar a familiares y amigos de presos», entre ellos cientos de vecinos de estos municipios que cada fin de semana han tenido que viajar a Huelva, Curtis (A Coruña), Puerto de Santa María (Cádiz), Granada, Algeciras, Fleury o Fresnes.

Añaden que en la actualidad «los sectores conservadores y ultras del Estado español tratan de dar marcha atrás en el ámbito político y sobre todo en el judicial. Las decisiones judiciales que deberían ser técnicas están salpicadas de los postulados e ideologías de la extrema derecha política, vulnerando de nuevo los derechos de los presos vascos. Están utilizando la Fiscalía del Estado y la Audiencia Nacional como instrumento de represión».

«Después de que los presos que han cumplido dos décadas, o incluso tres en prisión hayan obtenido el tercer grado y la semilibertad, estamos viendo una y otra vez que les vuelven a encarcelar, haciéndoles volver a segundo grado. Eso no es justicia. Eso es venganza», denuncian.

La movilización partirá el sábado 31 a las 18.30 de la plaza del Rebote de Villabona y llegará a la plaza Joxe Arregi de Zizurkil.

En el plano movilizador, ya este sábado, día 24, se ha llevado a cabo una manifestación de Sare en Gasteiz, y estaba prevista una concentración también en Lizarra.

En la capital alavesa, cientos de personas han recorrido diversas calles del centro para demandar el final de la política de excepción. También esta movilización, realizada con la vista puesta en la gran manifestación organizada para el 7 de enero en Bilbo, ha tomado un sentido especial al conocerse la última decisión de Tribunal Supremo español de no permitir la salida en tercer grado si el fiscal presenta recurso.

Condena cumplida

Por otro lado, este viernes Etxerat ha confirmado que el preso de Gasteiz Asier Bengoa López de Armentia ha acabado su condena, tras quince años de cárcel.

Bengoa ya estaba en situación de libertad condicional desde principios de este año.