Iñaki Iriondo

Lakua no tiene su prometido «plan de infraestructuras» para migrantes

Mientras dirigentes de PNV y PSE discuten sobre el centro de acogida de refugiados previsto por el Gobierno español en Gasteiz, lo cierto es que Lakua no ha cumplido el compromiso de «elaborar un plan de infraestructuras asistenciales polivalentes que dé respuesta a necesidades de acogida».

Firma del pacto de Gobierno entre PNV y PSE el 1 de setiembre de 2020.
Firma del pacto de Gobierno entre PNV y PSE el 1 de setiembre de 2020. (Endika PORTILLO | FOKU)

En el marco del rifirrafe que mantienen dirigentes de PNV y PSE sobre el centro de acogida para refugiados que el Gobierno español tiene previsto abrir en Gasteiz, el lehendakari Iñigo Urkullu invitó ayer a que «cada uno mire el programa de Gobierno de coalición» y que, según manifestó, entiende que «todos los integrantes del Gobierno conocen y los partidos que sustentan al Gobierno» también.

Pues bien, el programa de Gobierno del Ejecutivo de Iñigo Urkullu e Idoia Mendia tiene cuatro compromisos referidos a la «migración». En el último, el de «apoyar y dar cobertura y asistencia a personas migrantes en situación vulnerable», es el único en el que se recoge algo referido a equipamientos. Textualmente, se compromete en su última iniciativa a «elaborar un plan de infraestructuras asistenciales polivalentes que dé respuesta a las necesidades de acogida que plantean las diferentes realidades migratorias».

¿Qué ha hecho el Ejecutivo de PNV y PSE con este compromiso? Desde luego no ha elaborado ningún plan. Según el propio documento de «seguimiento de actuaciones» que figura en Irekia, la única acción ha sido que el 26 de mayo de 2022 «la Mesa de seguimiento de Ucrania acuerda remitir al Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones un acuerdo cuya intención es desbloquear el parque de viviendas destinadas a acoger a las personas ucranianas que han llegado a Euskadi huyendo de la invasión de su país».

Colaborar con Madrid

El programa recoge también el compromiso de «definir e impulsar un modelo vasco en política de asilo». Contempla «aprobar e implantar el modelo vasco de acogida a las personas migrantes que lleguen a Euskadi». Y añade que «este modelo se desarrollará a través del “VI Plan de Actuación en el ámbito de la ciudadanía, interculturalidad e inmigración”, desde la colaboración de las instituciones y agentes sociales implicados y mediante el Foro para la Integración y Participación Social de la Ciudadanía Inmigrante en Euskadi».

Asimismo, Lakua se compromete también a «definir, en el ámbito de las competencias propias, en colaboración con el Gobierno español, un modelo propio de acogida e integración. La fórmula del patrocinio comunitario tendrá un espacio destacado dentro de este modelo».

Una única reunión

La última iniciativa prevista en este terreno es la de «consolidar la Mesa Interinstitucional y Social que coordina la actuación en este ámbito».

Esa consolidación, según el documento de seguimiento del propio Gobierno de Lakua, se ha traducido en una única reunión que tuvo lugar el 1 de marzo de 2022 con el objetivo de «dar respuesta a la situación de las personas refugiadas como consecuencia de la invasión de Ucrania por parte de Rusia».

Se detalla que «se ha habilitado un recurso con 150 plazas en Irun para la atención en primera instancia; a partir de ahí, se derivará a las personas a los centros de Berriz, Oñati y Tolosa». Y se añade que «también se ha abierto un correo electrónico para recibir y coordinar los ofrecimientos individuales y las acciones particulares de solidaridad».

Sigue el rifirrafe

Mientras el programa está así, el lehendakari Iñigo Urkullu aprovechó una conferencia organizada por el diario “Deia” para decir que quería «huir de polémicas» con el líder del PSE, Eneko Andueza, si bien no se calló que «hay cosas que duelen por injustas», entre ellas, «la que más», la acusación de «xenofobia» al PNV. Al mismo tiempo insistió en que el proyecto de «macrocentro» en Gasteiz no es «el modelo», un sistema que también «lo rechazan» las entidades del tercer sector social y en Europa.

Sin embargo, el delegado del Gobierno español en la CAV, Denis Itxaso, sostuvo en Radio Euskadi que el centro previsto se adapta al modelo europeo. Y se preguntó si «¿el modelo vasco son las 250 plazas en un polígono industrial en Irun? ¿El modelo vasco es depender de la solidaridad de las familias? Si hay un modelo vasco debería estar circunscrito en el modelo europeo, que España hace suyo y pacta con los socios de la Unión».

Por su parte, ante las palabras del lehendakari, el PSE respondió que discrepar con el PNV en esta materia es «un ejercicio democrático» y advirtió de que «menos democrático es ocultar algunos hechos probados», como «las reuniones entre las dos Administraciones» sobre el centro.