Martxelo Diaz
Aktualitateko erredaktorea / Redactor de actualidad

Vecinos de Erripagaña se quejan ante el Defensor del Pueblo de la carencia de servicios

Las carencias del barrio de Erripagaña, dividido en cuatro municipios (Burlata, Iruñea, Eguesibar y Uharte), han sido denunciadas por los vecinos en una queja al Defensor del Pueblo de Nafarroa, en la que evidencian la carencia de servicios que padecen.

Vista del barrio de Erripagaña, divido entre cuatro municipios.
Vista del barrio de Erripagaña, divido entre cuatro municipios. (Iñigo URIZ | FOKU)

Vecinos de Erripagaña han presentado una queja ante el Defensor del Pueblo de Nafarroa en la que denuncian las carencias de este barrio de Iruñerria dividido en cuatro municipios (Burlata en un 60% de su territorio, Iruñea en un 21% y Eguesibar y Uharte en el restante 19%).

A día de hoy los habitantes de Erripagaña se estiman entre 11.280 y 13.526, aunque puede existir un mínimo de un 20% de habitantes no censados, «probablemente por no contar el barrio con los servicios que necesitan», según destacan los vecinos en la queja presentada al Defensor.

Junto a ello, subrayan que Erripagaña se encuentra desconectado del tejido urbano circundante convirtiéndose en «una isla» rodeada por el polígono de Areta hacia Uharte, el río Arga y su ropa hacia Burlata, la carretera PA-30 hacia Sarriguren (Eguesibar) y la PA-30 hacia Iruñea.

Los vecinos destacan que según la Ley de Administración Local de Nafarroa «en los procesos de creación y supresión de municipios, así como en la alteración de sus términos, nunca podrían dar como resultado el fraccionamiento de un espacio urbano continuo en más de un término municipal». Además, recuerdan que el objetivo de estas medidas deber ser garantizar la prestación de servicios a la ciudadanía.

Placas de Eguesibar en una calle de Erripagaña. (Iñigo URIZ/FOKU)

En la queja, explican que el PSIS inicial de Erripagaña se remonta a 1991 y que fue iniciativa de los ayuntamientos de Burlata y Eguesibar. Desde una plan para uso industrial y terciario se ha pasado a uno residencial, en el que se ha reducido notablemente el uso comercial.

Convenios sin cumplir

«Tal y como indicó el Departamento de Ordenación del Territorio, se planificó el desarrollo de un barrio de gran crecimiento sin determinar cuál iba a ser el modelo de gestión y la participación de los ayuntamientos a los que afectaba, y ahora hay una necesidad de equipamiento que nos obliga a determinar un modelo de gestión», añaden.

En este sentido, recuerdan que los cuatro ayuntamientos firmaron en 2016 un convenio marco para establecer las líneas básicas de colaboración y coordinación en los servicios de limpieza viaria, mantenimiento de zonas verdes, seguridad ciudadana y tráfico. Lo que se concibió inicialmente como una «solución provisional» posteriormente no ha tenido el desarrollo adecuado. De este modo, denuncian que el Consejo intermunicipal creado para coordinarse solo se ha reunido una vez en esta legislatura, a pesar de que está previsto celebrar encuentros trimestrales.

Placa de Burlata en una calle de Erripagaña. (Iñigo URIZ/FOKU)

En 2019, se acordó la creación de una mesa de trabajo para buscar soluciones a los problemas de los habitantes de Erripagaña, «pero nada se supo de sus trabajos», denuncian. En 2021 no pidieron ayuda a la Dirección General de Administración Local, «pero no obtuvimos respuesta».

Los dos últimos pasos que se han dado en este ámbito han sido un grupo de trabajo con los cuatro ayuntamientos impulsado por el Gobierno navarro que ha logrado planificar el uso de las parcelas educativas y la creación de una sección de Erripagaña en el Ayuntamiento de Burlata, «cuyo alcance está sin concretar».

«Fuente de ingresos»

Los habitantes de Erripagaña critican que los cuatro ayuntamientos coinciden a la hora de considerar el barrio como «una fuente de ingresos» y recuerdan que el Ayuntamiento de Burlata ha incumplido la recomendación de la Cámara de Comptos de abril de 2020 de elaborar un análisis del futuro de los gastos e ingresos provenientes del barrio.

Comptos señala que el Ayuntamiento de Burlata incrementó en 2018 en un 99% los ingresos por impuesto de construcciones gracias a Erripagaña.

Este informe señala que en 2018 se incrementó en Burlata en un 99% los ingresos del impuesto indirecto de construcciones, instalaciones y obras.

Placa de Iruñea en una calle de Erripagaña. (Iñigo URIZ/FOKU)

«Sin duda, los ingresos son cuantiosos para los ayuntamientos. Sin embargo, a la hora de cuantificar los gastos que supondrían los servicios necesarios, nadie quiere concretarlos. El Ayuntamiento de Pamplona aprobó en junio de 2022 la elaboración de un estudio sobre la viabilidad económica de que Pamplona se hiciera cargo de todo el barrio, pero el equipo de gobierno se niega argumentando que es inútil desviar recursos públicos a hacer un informe sobre las consecuencias de algo que no va a suceder porque el Ayuntamiento de Burlada es contrario a renunciar a la parte de Erripagaña que le corresponde, ya que sería renunciar a una fuente de ingresos muy importante», señala la queja de los vecinos.

Frente a ello, denuncian que, mientras, no se ofrecen a los habitantes de Erripagaña los servicios que necesitan. «No se han ejecutado las dotaciones planificadas. A pesar de tener cerca de 5.000 viviendas construidas, solo se ha construido el campo de fútbol del Burladés y no se ha avanzado en equipamientos como guarderías, centro sanitario, educativo, etcétera. Como reconoce el plan urbanístico municipal de Burlada, habría que incorporar los servicios y dotaciones que ha incorporado el desarrollo del PSIS de Erripagaña», exponen.

En materia educativa, el Departamento del Gobierno navarro considera que las dotaciones en Iruñerria son suficientes y que las necesidades de Erripagaña deben ser atendidas con los recursos del entorno.

Sin centro de salud, sin transporte...

En salud, está creada la zona básica de Erripagaña y materializada la cesión de la parcela para el centro de salud, que inicialmente estaba previsto para 2023 pero se ha retrasado hasta 2025, según denuncian los vecinos en su queja.

«En la asociación hemos elaborado la hoja de ruta de dotaciones dos veces, basándonos en encuestas al vecindario: una en 201965, y otra en 202166. Las dos veces se la hicimos llegar a las administraciones, pero no hemos recibido respuesta. Está claro que los ayuntamientos no cuentan con ningún plan para dotar de servicios al barrio. Sin embargo, el barrio lo necesita con urgencia», señalan.

Los vecinos subrayan que Erripagaña cuenta con su propia identidad social y cultural, con unas fiestas del barrio que se celebran desde 2015.

La queja vecinal subraya que Erripagaña cuenta con su propia identidad social y cultural y que las fiestas del barrio se vienen celebrando desde 2015. Además, existe un grupo de euskara y una txaranga y se han organizado eventos como la castañada, carnavales propios, Santa Ageda, Gau Beltza, Olentzero, cine de verano, un torneo de baloncesto street o herri kirolak.

La división del barrio en cuatro ayuntamientos crea desigualdades en derechos y obligaciones. Así, explican que los vecinos de la parte del barrio que pertenece a Iruñea pagan un 80% más de contribución urbana que los que viven en la zona que es de Eguesibar.

Las subvenciones para el comedor escolar también dependen del municipio al que se pertenezca la calle en la que se vivie. En el de Mendillorri, el más cercano a Erripagaña, solo pueden beneficiarse de esta ayuda los empadronados en la zona del barrio perteneciente a Iruñea. Los que viven en calles que corresponden a Burlata o Eguesibar no pueden acceder a la escuela infantil municipal de Mendillorri. Quienes no están empadronados en la zona correspondiente a Burlata, en cambio, tienen tasas «prohibitivas» de 1.619 euros frente a los 262 que pagan los inscritos en Burlata.

Los empadronados en Burlata tienen prioridad también para las escuelas deportivas de fútbol base el campo de Erripaña, a pesar de que está situado frente a viviendas pertenecientes a Iruñea.

En cuanto al transporte, Burlata y Uharte no tienen conectado su núcleo urbano con Erripagaña, mientras que Iruñea y Eguesibar sí lo tienen.

«Es paradigmático el servicio de policía local, que es diverso según la capacidad de cada cuerpo, aunque tiene en común que para cada policía el trozo de Erripagaña no es relevante respecto al resto de cada municipio. Este servicio viene siendo recortado en diferentes municipios del barrio como Burlada y el Valle de Egüés, y que plantea la duda razonable de si estos municipios tienen plantilla suficiente para dar servicio a Erripagaña. Mientras, bares y comercios de Erripagaña reclaman seguridad tras la oleada de robos en el barrio», señala la queja vecinal presentada al Defensor del Pueblo.

«Las mismas dudas razonables se plantean en torno a otros servicios. En el servicio de limpieza viaria, se da el caso que tres ayuntamiento diferentes con tres servicios de limpieza diferentes limpian una misma calle, cada una su tramo. En jardinería, otro servicio básico, también son patentes la diferencia de riego y verdor. La misma ineficacia, ineficiencia, incoherencia y falta de calidad se da en temas como la señalización viaria, asfaltado, actuaciones invernales...», añade la queja vecinal.

Por ello, reclaman que se desarrollen con urgencia las dotaciones contempladas en el PSIS para ofrecer los servicios adecuados a la población presente y futura de Erripagaña, que los ayuntamientos inviertan los ingresos generados en el barrio en el mismo barrio y que todos los vecinos tengan los mismos derechos y obligaciones al margen del municipio en el que están empadronados. Además, reclaman que se haga un análisis de la viabilidad financiera del barrio.