Imanol Intziarte

Denuncian una gran grieta «provocada por las obras del Metro» en un edificio de Donostia

El movimiento vecinal Satorralaia alerta de «la desestabilización estructural» ocasionada en un edificio de la calle Zubieta, justo enfrente del Hotel de Londres, una zona en la que ya se produjeron hundimientos en el año 2020. 

Grieta en el patio de los portales 1 y 1E de la calle Zubieta de Donostia.
Grieta en el patio de los portales 1 y 1E de la calle Zubieta de Donostia. (SATORRALAIA)

El movimiento vecinal Satorralaia ha denunciado «la gravedad de la desestabilización estructural provocada por las obras del Metro» en un edificio de la calle Zubieta de Donostia. Este colectivo adjunta a su nota una fotografía que corresponde al patio que une los edificios Zubieta 1 –que hace esquina con la calle Easo– y Zubieta 1E, en el centro de la capital guipuzcoana.

«El tamaño de la fisura pone de manifiesto la gravedad de la desestabilización provocada en el edificio, donde se ha producido un movimiento de la estructura del inmueble con inclinación del edificio hacia la zona de obras», subraya Satorralaia, que tacha e «inadmisible que daños de esta envergadura sean silenciados ante la ciudadanía» por el Gobierno de Lakua, a quien corresponden las obras como gestor de Eusko Trenbide Sarea, y el Ayuntamiento.

La calle Zubieta, que transcurre paralela al paseo de La Concha desde el hotel Londres hasta La Perla, viene siendo la zona más afectada por estas obras. Así, en junio de 2020 se produjo un desprendimiento en el sótano del número 8, mientras que en noviembre de ese mismo año se generó un agujero de unos dos metros de diámetro en la calzada y hubo un nuevo socavón en mayo de 2021. Fueron parte de los problemas que llevaron a paralizar la obra temporalmente para rediseñar los trabajos y firmar un nuevo contrato debido al aumento de los gastos.

Seis metros al mes

Satorralaia ha indicado que «el frente de excavación del túnel bajo la playa se sitúa actualmente en las proximidades del voladizo del Paseo de La Concha y se adentrará en los próximos meses en una zona que el Proyecto Constructivo considera como un punto crítico». Se refiere a las inmediaciones de la calle Rafael Muñoa, uno de los pequeños tramos que unen Zubieta y La Concha, donde «se atravesará nuevamente la fractura del substrato rocoso que originó el grave siniestro y el primer socavón del 5 de junio de 2020».

La pasada semana, el director de la obra, el ingeniero Antonio López Palenzuela, informó durante un acto en el Kursaal de que la excavación bajo La Concha avanza a un ritmo de solo seis metros al mes, pero «con toda seguridad». Atribuyó el socavón de Zubieta 8 a una entrada de agua y arena en el túnel a unos 110 metros de distancia.

Para evitar sucesos similares se excava primero un pequeño agujero, en cuyo interior se inyecta cemento a la roca para asegurarla antes de expandir el orificio. Este proceso no permite avanzar tan deprisa como se podía prever en un principio.