La tercera edición de la Ruta al Exilio (REX) ultima sus preparativos, al tiempo que abre desde el 1 de marzo al 9 de abril el periodo de inscripción. Se trata de un viaje formativo, dirigido a jóvenes de 16 y 17 años, en el que se visitan lugares de memoria. Si en la expedición de 2022 recorrieron fundamentalmente a pie las principales localidades del exilio republicano transpirenaico entre el Alt Empordà y Catalunya Nort, el próximo mes de julio se van a adentrar durante dos jornadas en Nafarroa a través de la GR225.
En esta ocasión la ruta se titula 'Cicatrices del paisaje' e incluye itinerarios de la represión de 1936 en Nafarroa, pero también explorará de nuevo la frontera pirenaica y la costa mediterránea en Catalunya. En tierras vascas, los y las participantes visitarán el Parque de la Memoria de Sartaguda, la cantera de Argaitz de Bera, el monumento al exilio de Elizondo, así como recorridos contemplados en el proyecto Fronteras de Hormigón, donde se recogen las fortificaciones defensivas construidas por el franquismo gracias al trabajo forzado de prisioneros republicanos.
El nombre de esta edición parte del concepto técnico utilizado por los arqueólogos para explicar todas aquellas transformaciones del entorno generadas por el ideario del conflicto, de lo bélico, pero que al mismo es identificado e integrado por el paso del tiempo, la naturaleza o cualquier persona como una marca o una cicatriz.
«Memoria crítica»
Para Josemi Gastón, director del Instituto de Memoria de Nafarroa, «proyectos como este son fundamentales porque acercan la memoria de los procesos traumáticos del pasado a las generaciones más jóvenes. Una memoria crítica que analice ese pasado y que construya sociedades más respetuosas con los derechos humanos».
El paso de la ruta por Nafarroa, según Gastón, está debidamente justificado porque «fue parte de ese pasado traumático, donde se produjeron hechos como la Fuga de San Cristóbal en mayo de 1938, donde 800 presos se fugaron hacia un horizonte que desconocían, pero siempre guiados por el faro de la libertad».
La consejera navarra de Relaciones Ciudadanas, Ana Ollo, recibió el sábado en Lekaroz al medio centenar de jóvenes que han participado en las dos ediciones anteriores. En su intervención, expuso que «el 18 de julio de 1936 se produjo, como sabéis, el golpe militar franquista. En Navarra triunfaron los golpistas y multitud de personas tuvieron que huir con celeridad para evitar ser apresadas y asesinadas en fosas comunes».
La consejera también recordó que el Gobierno Chivite, a través del Instituto Navarro de la Memoria, lleva años impulsando políticas públicas de memoria, dirigidas a la ciudadanía en general y a la juventud en particular. «Necesitamos jóvenes con memoria con una memoria crítica con todos los procesos de vulneración de los derechos humanos, tanto del pasado como del presente, sobre todo porque los ecos de un pasado violento se siguen escuchando por demasiados rincones del planeta», concluyó Ollo.
Ruta al Exilio es un proyecto educativo vinculado a la memoria democrática impulsado por el Instituto de la Juventud (INJUVE), el Instituto Navarro de la Memoria, el Observatorio Europeo de Memorias (EUROM, Fundación Solidaritat de la Universitat de Barcelona) y Be Wild Be Proud.
Para participar en la ruta, los jóvenes interesados tienen que enviar una carta de motivación y una propuesta de proyecto creativo que, en caso de ser seleccionados, deberán desarrollar en el transcurso de la misma. Estos proyectos pueden ser de tipo artístico, periodístico o ensayístico y contarán con la tutorización de un miembro del equipo de REX. En las dos ediciones realizadas (2021 y 2022) el Ruta al Exilio ha recibido más de 400 solicitudes.