Agentes de la Policía Foral han interceptado a un vecino de La Rioja que dejó abandonado un todoterreno cargado con 22 perros para intentar evitar un control de seguridad establecido en las inmediaciones de la localidad de Erriberri.

Según ha informado el cuerpo autonómico, al observar la presencia policial el hombre, con antecedentes por hechos similares, huyó con el vehículo del lugar, siendo localizado poco después cuando se alejaba en un coche conducido por otra persona.

Según dijo a los agentes, que procedieron al control del todoterreno, el remolque, los cánidos, su documentación y las condiciones de cuidado, solo le quedaban cinco puntos en el carné y no podía quedarse sin permiso de conducir, porque «es autónomo y trabaja en el campo y necesita el coche».

Según el decreto que desarrolla la ley foral de protección de animales de compañía es obligatorio transportarlos adecuadamente, asegurando su comodidad, y facilitar la documentación a la autoridad competente, y el incumplimiento de la norma puede llegar a constituir una infracción grave.

Es además obligatorio tener a los animales identificados y vacunados, y realizar los tratamientos que sean declarados obligatorios por las autoridades.