Sabido es que las películas basadas en video-juegos, juegos de rol y juegos de mesa en general no han solido funcionar de primeras en la pantalla, debido a que es muy difícil contentar a la vez a gamers y a espectadores. Pero la insistencia de los grandes estudios en la explotación del mercado del juguete es tal que al final han acabado por conseguir conciliar a ambos sectores de público como si fueran uno solo.
La trayectoría de ‘Dragones y mazmorras’ en el cine es bien explícita al respecto, porque el primer intento no arrojó los beneficios esperados. ‘Dungeons and Dragons’ (2000), realizada por Courtney Solomon, y con un reparto irregular encabezado por Thora Birch, Marlon Wayans y Jeremy Irons, tuvo un par de secuelas que pasaron desapercibidas.
Como casi nadie se acuerda de ellas, Paramount y Eone no han dudado en comprar los derechos a la empresa juguetera Hasbro con la intención de lanzar una nueva franquicia cinematográfica, que dependerá del éxito en taquilla de ‘Honor entre ladrones’ (2023). En principio todo apunta a que la recepción, tanto crítica como comercial, han sido buenas, por lo que el final abierto de rigor tendrá su continuidad a buen seguro.
Independientemente de que la narrativa utilizada siga mejor o peor la mecánica del que fue el primer juego de rol de la historia, puesto a la venta en el año 1974, la película que ahora se estrena ha logrado el consenso de la audiencia gracias, sobre todo, al buen diseño de personajes.
No ha habido un derroche innecesario o excesivo en la contratación del casting, y los 45 millones de dólares presupuestados se han empleado para buscar actrices y actores que se ajusten a las diferentes tipologías, bien por el bando del grupo de ladrones protagónico, como de la galería de villanos a los que se han de enfrentar. En este segundo plantel Hugh Grant repite sus tics narcisistas y Daisy Head se luce como Sofina. En frente destacan Chris Pine, Michelle Rodriguez y Justice Smith.