A punto de cumplirse 13 días de huelga secundada por la plantilla del Centro Vasco de Transfusión y Tejidos Humanos, los sindicatos Satse, ELA, LAB, CCOO, UGT y UTESE han realizado este viernes en Bilbo una valoración positiva sobre su seguimiento. Han asegurado que en torno al 90% de los y las trabajadoras se han sumado a la convocatoria, a pesar de los servicios mínimos «abusivos», y esperan que Osakidetza responda a sus emplazamientos al diálogo.
En su afán por alcanzar una salida «negociada y eficaz», las centrales han vuelto a emplazar a los responsables de Osakidetza a buscar una salida negociada al conflicto, que permita terminar con la «injusta discriminación» que sufre la plantilla de este servicio imprescindible que garantiza el abastecimiento de sangre y tejidos en la CAV.
«Llevamos muchos meses pidiéndole a la dirección del Servicio Vasco de Salud que queremos negociar, llegar a una solución que permita terminar con esta injusta discriminación que las y los trabajadores del Centro Vasco estamos sufriendo sin explicación alguna y esperamos que esta vez Osakidetza se preste al acuerdo y lo consigamos», han expuesto.
«Discriminación anacrónica e injusta»
Los sindicatos han explicado que el personal «sufre una discriminación anacrónica e injusta y no se reconoce la importante labor que realizan, ya que cobra un 4% menos que el resto de las compañeras de Osakidetza, realizando las mismas o similares funciones».
Por este motivo, exigen que se termine con este agravio comparativo. «Incluso desde el Parlamento Vasco se ha instado a Osakidetza a que ponga fin a esta situación», han incidido.
Los sindicatos han recordado que la plantilla lleva ya más de dos años de conflicto. «Vamos a seguir con las movilizaciones hasta que Osakidetza desbloquee la situación y decida equiparar las condiciones con el resto de personal del ámbito hospitalario», han asegurado.